El Grafometal se lleva un susto pero pasa a la siguiente ronda copera

Durante buena parte del encuentro acechó la sombra de la sorpresa, del equipo de menor nivel comiéndose al rival de la poderosa Liga Guerreras. Sobre todo, cuando el Oviedo colocó un abrumador 10-3 en el luminoso con más de la primera mitad del choque consumida. La defensa del Grafometal hacía aguas y su ataque caía en pérdidas y errores continuos.

Pero cuando peor estaban las cosas para las de Juanjo González fue cuando emergió el bloque sólido que tan buen papel está completando en la máxima categoría del balonmano defensivo español.

El Sporting comenzó a restarle distancia a las asturianas y, con un parcial de 1-8, alcanzó la igualada en el marcador (11-11). Todavía le costó un tiempo extra ponerse por delante por primera vez. Lo hizo de la mano de un penalti transformado por Blanca Benítez, la mejor del partido (13-14). Corría ya el minuto 46.

Las riojanas ya habían encontrado el camino a seguir, con una Geandra Rodríguez fantástica en la portería y la sevillana dirigiendo las operaciones en ataque, y ponían el 15-18. No se rindieron las asturianas, que lo intentaron hasta el final, pero la cancerbera brasileña del Grafometal les quitó de la cabeza la posibilidad de volver a retomar el mando. El choque y la eliminatoria era para las riojanas.