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El multitudinario paseo de Santo Domingo
Los calceatenses abarrotan las calles al paso de la imagen del patrón de la ciudad en una procesión que la lluvia amenazó pero que pudo llevarse a cabo con normalidad
Doce de mayo. El día más grande de las fiestas del Santo, y, para muchos, también el más largo. La 'culpa', del Almuerzo del Santo, ... que puesto a tan temprana hora como las siete de la mañana, incita a trasnochar. Lógico. Y así, al amanecer, la casa de la cofradía del Santo se convirtió en destino para buena parte del vecindario. Unos acudieron a la misa de las seis de la mañana y, los más, directamente a por los garbanzos con carnero que tanto reconfortan los estómagos, y más en una noche fría como la que viene al caso. Hasta allá los condujo, en animado pasacalles, la charanga Los Gallitos.
Con este tradicional preámbulo comenzó la festividad de Santo Domingo de la Calzada, que sembró su principal acto religioso, la procesión, de bastantes dudas sobre su realización, ya que llovió intermitentemente, aunque poco, en las horas previas.
Finalmente salió, tras la misa solemne presidida por el obispo Santos Montoya, ante una plaza del Santo que rompió en un emotivo aplauso cuando la imagen se perfiló en el dintel de la puerta de la catedral. La Coral Calceatense, dirigida por Fernando San Romualdo, y la banda municipal de música, la recibieron a los sones de 'Voces se elevan al cielo'. Gaiteros y danzadores tomaron después el relevo y la comitiva arrancó, abriéndose paso entre calles atestadas de público. Engrosaron la comitiva autoridades nacionales, regionales y locales, entidades acogidas al patronazgo del Santo y cofradías. Mañana será jornada de transición, con el relevo en la cofradía del Santo.
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