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Torres, en primer término, y en la fila de la derecha, de atrás hacia delante, Willibaldo, John Fredy y Santiago. SANDA

Cervera del Río Alhama

Eduardo Torres, un párroco de casa

El arciprestazgo reestructura la zona y pasa de cinco a cuatro sacerdotes, dos atenderán las parroquias del Alhama y otros dos, las del Linares

Jueves, 3 de agosto 2023, 09:07

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El 27 de agosto, el obispo de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, Santos Montoya, acudirá a la parroquia de Santa Ana de Cervera del Río Alhama para presidir la toma de posesión de Eduardo Torres como párroco, a las 11.00 horas. Se ocupará de las parroquia de Santa Ana y San Gil, Cabretón, Valverde, Valdegutur, la capellanía de monjas carmelitas de Cabretón y la comunidad de la Alta Gracia de la residencia cerverana.

John Fredy Quintero, colombiano, continuará en Aguilar, Inestrillas, Navajún y Valdemadera, pero vivirá en Cervera, donde ejercerá como vicario parroquial.

Los misioneros mexicanos que se encargaban hasta ahora de los feligreses cerveranos, Willibaldo Valdez y Santiago Buenaventura, se trasladan como copárrocos al valle del Linares (Igea, Cornago, Valdeperillo, Grávalos, Rincón de Olivedo, Ventas del Baño, Muro de Aguas y Villarroya).

Eduardo Torres es el primer 'cura pilongo' de Cervera, donde será párroco en la misma iglesia en la que fue bautizado

El nombramiento de Eduardo Torres (que en los últimos 14 meses se ocupaba de la zona del Linares) destaca porque es natural de Cervera y en la historia del municipio no existen datos que indiquen la presencia de un 'cura pilongo' (que ejerce como párroco en la misma iglesia en la que fue bautizado). No es habitual, pero tampoco hay nada que impida esta circunstancia.

«Supone un compromiso para servir a mis paisanos con más dedicación. Aunque cuando uno trabaja fuera, tiene más libertad de acción, comprendo que estamos menos sacerdotes y el obispo ha tenido que prescindir de uno en el arciprestazgo», indica.

Las parroquias de la comarca situadas en el Alhama pasan de tres a dos religiosos y las del Linares se mantienen con dos. Se reorganiza el arciprestazgo para aprovechar sus recursos.

«Las de Cervera han tenido muchos sacerdotes y feligreses y me tocará ajustarlas a la realidad de hoy, con pocos sacerdotes y personas. La ventaja de ser del pueblo es que conoces lo esencial en las tradiciones y ves qué se puede recortar o no», explica Torres.

Seguirá como profesor de Teología (exégesis bíblica) y acudirá una vez por semana a la Universidad de Navarra. También es el arcipreste del Alhama-Linares y director del Instituto de Ciencias Religiosas de Logroño.

Eduardo Torres tiene 60 años, estuvo 15 (de 1990 a 2005) en el seminario de Ponce, en la Universidad Católica de Puerto Rico, fue profesor de teología de la Universidad Pontificia de la Santa Cruz en Roma, donde se doctoró en Teología. También es doctor en Filología Clásica por la Universidad Complutense.

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