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Luis Martínez-Portillo entrega a Marisa Sánchez, acompañada de Paniego, el panel con su trayectoria que se colgará en el museo.
Marisa, emisaria de la huerta
CALAHORRA

Marisa, emisaria de la huerta

La fundadora del 'Echaurren' de Ezcaray fue nombrada ayer Embajadora del Museo de la Verdura de Calahorra

I. ÁLVAREZ

Viernes, 23 de mayo 2014, 00:54

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En la trayectoria profesional de este gran alma de la cocina riojana se recogen infinidad de galardones e importantes reconocimientos como el Premio Nacional de Gastronomía (1987). Pero ayer recibía uno muy especial que incluso llegó a emocionarle. Marisa Sánchez, la fundadora del restaurante 'Echaurren' de Ezcaray y madre del prestigioso chef riojano Francis Paniego, fue nombrada ayer Embajadora del Museo de la Verdura de Calahorra.

Recibió los honores de manos del alcalde de la ciudad, Luis Martínez-Portillo y en la misma instalación que a partir de ahora deberá promocionar como buena representante.

«Un homenaje obligado». Así calificaba Martínez-Portillo el hecho de que el Ayuntamiento calagurritano hubiese pensado en Marisa Sánchez como embajadora del museo. Es la primera mujer que recibe este título, que el año pasado fue concedido al cocinero Lorenzo Cañas y al fallecido Saturnino Martínez. Desde ahora el panel con la imagen de Marisa y una reseña de su vida profesional podrá verse en una de las paredes de la segunda planta del museo junto a los cuadros de los otros dos embajadores.

Para el Consistorio de Calahorra elegir a Marisa Sánchez representante del museo más original e innovador de la localidad ha sido fácil. «¿Quién puede trabajar mejor los productos de la huerta?», decía el alcalde, destacando que «en muchos de sus platos ha hecho figurar las verduras de la huerta». «Es un honor que ella esté aquí porque es una referencia en la cocina riojana y española», apuntaba Martínez-Portillo.

Por su parte, Marisa Sánchez, agradecía «de todo corazón» esta distinción que le ha brindado una ciudad «a la que quiero tanto», señaló. Como no podía ser de otra manera, la fundadora del 'Echaurren' vino a Calahorra acompañada de su hijo Francis Paniego, al que dirigió varios halagos por su buena mano en la cocina.

Una pasión que él ha heredado de su madre, quien ayer revelaba que ya desde muy pequeña le gustaba «jugar a las cocinitas con sus amigas». «Yo siempre era la cocinera», recordaba Marisa ante los medios de comunicación.

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