Arnedillo demanda más servicio

Ante esta situación, el Ayuntamiento de Arnedillo está llevando a cabo movimientos para reclamar que los servicios no abandonen al mundo rural, efecto directo del fenómeno de la 'España vaciada'. Antes de que el cajero quedara fuera de servicio, en junio, el Ayuntamiento de Arnedillo remitió una carta a la directora de Ibercaja en Arnedo y a la dirección en Zaragoza para solicitar que su oficina en Arnedillo pase de abrir únicamente los martes de 8.30 a 14 horas, como hasta ahora, a tres días a la semana en horario completo de mañana.

«Considerando el carácter turístico de Arnedillo, la existencia de una empresa de cien empleados y otras varias del ramo de la hostelería y alojamiento principalmente, la afluencia de visitantes y las numerosas segundas residencias, creemos justificada y necesaria la prestación de mayor servicio de su entidad a través de la oficina que dispone en este pueblo», exponía el Ayuntamiento en el escrito que acompañó con 246 firmas de vecinos y representantes de establecimientos, mostrando el sentir colectivo por esta solicitud.

Sin recibir respuesta a la misma más allá de una reunión con el primer edil en la que le manifestaron que estudiarían el asunto, la villa vive todo lo que va de octubre sin cajero en Ibercaja. De este modo, el acceso al dinero de vecinos y turistas es el cajero de Bankia durante seis días a la semana. «Esta situación ha coincidido con tres fines de semana con la villa a tope de visitantes. Y estamos viendo pagar gente un café con tarjeta -lamenta el alcalde arnedillense, Pedro A. Montalvo-. Somos un pueblo con una gran cantidad de nóminas gracias al turismo y merecemos tener servicio».

Ante la alternativa de la banca electrónica, Montalvo recuerda que la mayoría de las personas mayores no están familiarizadas en su uso, sino que su referencia es la persona que atiende al otro lado de la mesa. «Estas son algunas de las situaciones que impiden que el mundo rural crezca», se resigna.