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Ernesto Pascual
Jueves, 12 de junio 2014, 09:25
La primera tormenta importante de la temporada estival dejó en la tarde de ayer un inusual y brusco aumento del caudal del río Cidacos y obligó a que los bomberos del CEIS-Rioja intervinieran en las Pozas de Arnedillo para rescatar a unos bañistas que habían quedado atrapados al otro margen del cauce.
A media tarde, en una jornada en la que la Agencia Estatal de Meteorología había decretado el nivel amarillo por tormentas, una copiosa y fuerte descarga, que estuvo acompañada de granizo, sorprendió al Alto Cidacos. En unos minutos, la tromba se convirtió en una sorprendente riada que aumentó el volumen del río con aguas bravas y embarradas.
Aunque ni la tormenta ni la riada dejaron daños, el repentino incremento del volumen dejó aislados a tres bañistas, un padre con sus dos hijos, en la zona de baño de las Pozas. Ante la alarma, acudieron los bomberos del CEIS para evacuarlos. Para ello, se desplazaron al otro margen del río y se descolgaron por la ladera por un sistema de sirgas hasta llegar a ellos. Una vez asegurados, elevaron a los bañistas hasta una zona limpia sin que sufrieran daño alguno. «Los bomberos han actuado de una forma extraordinaria, demostrando su gran profesionalidad», aplaudió el alcalde de la villa, Pedro A. Montalvo.
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