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Honor en la derrota
BALONCESTO

Honor en la derrota

El Clavijo cae ante el Lucentum (118-115) en un partido soberbio que acabó después de tres prórrogas

PPLL

Lunes, 8 de octubre 2012, 19:11

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Casi tres horas de partido. 180 minutos de entrega total, buen juego y sacrificio. Un estreno de liga soberbio. Y una derrota dolorosa (118-115). El Clavijo ha caído en su primer encuentro de la liga Adecco Oro ante el Lucentum Alicante, uno de los favoritos al ascenso. Y lo ha hecho tras disputar tres prórrogas, pelear por cada balón y ofrecer un pulso interminable a un equipo bestial confeccionado para volver por la vía rápida a la ACB.Al final, quedará la derrota, pero lo más importante que se ha podido ver esta mediodía en Alicante ha sido la entrega y la garra del conjunto de Jesús Sala, que parece muy bien armado tras una pretemporada exigente. Este equipo puede dar motivos para soñar, aunque a veces se tuerzan las cosas, como hoy, cuando tras dominar casi todo el tiempo natural del partido se ha visto superado en la tercera prórroga. Una desgracia, sí, pero también un aviso a todos: el Clavijo ha venido a dar guerra a cualquiera.

El conjunto riojano ha salido disparado desde el primer cuarto, apoyado en el acierto de Galarreta y Rakocevic y en el juego interior de Sidao, que se ha visto las caras con Middleton. En ese primer asalto, los riojanos han conseguido una ventaja de ocho puntos (19-27), sorprendiendo a un Lucentum que esperaba un retorno más sencillo a la categoría.

Pero de algo que andan sobrados los de Jesús Sala es de actitud. En el segundo cuarto han seguido dominando el juego, aunque los locales limaban la diferencia gracias a Pedro Rivero y un inspirado Coppenrath. Aun así, el marcador reflejaba un 40-46.

Quedaba sufrir y los de Sala han dado todo desde ese instante. David Mesa y Alberto Ruiz Galarreta han marcado diferencias, llevando la máxima diferencia hasta los 10 puntos (53-63). Los alicantinos han pegado un arreón y han logrado recortar hasta cinco puntos la diferencia (58-63).

Era cuestión de sobrevivir a la presión de un equipo ansioso y el Clavijo ha notado, en el último cuarto, lo que hace diferente a los grandes. Un banquillo más largo, sumado a la exclusión de Serna, muy trabajador en tareas defensivas, han propiciado que la ventaja se minimizase jugada a jugada. El Lucentum se ha puesto dos puntos a falta de siete minutos y la lucha contra el crono no ha favorecido a los riojanos, ante el vendaval de los José María Berrocal. A partir de se momento, las igualadas se multiplicaron: a 69, 72 y a 83, gracias aun triple de Pedro Rivero cuando quedaban 23 segundos. En la última posesión, el Clavijo ha perdido el balón y el encuentro ha llegado a la prórroga.

La igualdad se ha mantenido y la tensión se ha disparado. Si durante el partido ha sido el Clavijo el que ha tirado del marcador, en el primer tiempo extra ha ido a remolque, pero con diferencias mínimas. Enorme esfuerzo de los jugadores y alarde de inteligencia, tratando de evitar la quinta de Sidao. Mientras, Middleton se ha ido a la caseta por acumulación de personales. El partido seguía siendo de infarto y un triple de Rakocevic junto a la aportación de Mikel Úriz, con dos tiros libres ha conseguido poner el 95-95 cuando parecía que todo estaba ya perdido. Nada más empezar la segunda prórroga, Sidao ha sumado la quinta falta y, sin Serna ni el hispano brasileño, el juego en la pintura ha recaído sobre Mesa, que se ha batido como un valiente. El marcador seguía atado con un cordel. Ni un milímetro de separación ni más de tres puntos de diferencia. Del 98-95 se ha pasado en apenas dos minutos al 100-100 gracias a un triple de un soberbio Úriz. En el último minuto de infarto, Úriz ha conseguido poner el 100-102, pero Sabat ha igualado a falta de dos segundos para el final.

La tercera prórroga era un hecho. Coppenrath ha hecho mucho daño con su acierto. Los empates han seguido sucediéndose en un carrusel de locura: a 107, a 109 Pedro Rivero, con su enésimo triple ha puesto el 112-109 a falta de un minuto, justo tras la exclusión de Coppenrath. Y entonces ha aparecido Shaun Green. Dos ataques consecutivos y, a falta de 54 segundos, adelantaba a su equipo por 4 (115-111). Arévalo, en dos secuencias seguidas de tiros libres, ha podido acercar al Clavijo en el marcador, pero ha errado los dos segundos y ambos balones los han reboteado los alicantinos, lo que les ha permitido abrir brecha hasta el 118-113. Esta vez sí que Arévalo ha anotado ambos lanzamientos y, a falta de siete segundos, los riojanos perdían por tres puntos con el balón a favor de los locales. Nada más (de todo lo hecho) se ha podido hacer y el Clavijo ha caído con honor ante un Lucentum que ha sudado la gota gorda.

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