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Economia

Calidad, distinción y respuesta

Las empresas coinciden en destacar la necesidad del diseño como motor de la diferenciación y de la calidad en los mercados globalizados

CÉSAR ÁLVAREZ

Domingo, 3 de enero 2010, 02:08

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Dos empresas agroalimentarias -Arluy y Ontañón- y los alumnos de diseño gráfico e industrial de tercer curso han tenido la oportunidad de trabajar sobre dos proyectos con el asesoramiento de profesionales del ramo (Estudiosat y Estudio Integral en el ámbito del diseño industrial, y Moruba y Módulo en el del diseño gráfico).

Todas las partes coinciden en la necesidad y utilidad de celebrar jornadas como las que han tenido lugar recientemente. Es más, Cristal D'Cruz, responsable de marketing de Arluy, reconoce que el hecho de que en esos talleres participaran estudiantes fue una de las motivaciones que le llevó a la empresa de galletas a involucrarse en el proyecto. Los profesionales reconocen igualmente que de la Escuela de Arte pueden surgir nuevas e interesantes. La mecánica de los talleres fue igual en los dos proyectos. Las empresas (Arluy y Ontañón) hicieron una exposición de sus productos y posteriormente los alumnos hicieron un análisis de esa información para desarrollar su creatividad. Sergio Lumbreras, de Módulo, explica que en estas últimas dos fases es donde su intervención fue mayor porque «tratamos de orientar a los alumnos sobre el mercado real. A veces veíamos que surgían ideas buenas, pero que difícilmente podían llevarse a cabo. En algunos casos por cuestión de los materiales utilizados o en otros, por el tema de los embalajes era imposible hacerlas realidad».Arluy buscaba un punto de diferenciación para un producto novedoso: 'Xpaby' (una galleta de cacao que contiene la misma cantidad de cafeína que una taza de café). Cristal D'Cruz explicaba que «el diseño es importante porque la imagen ayuda a transmitir el concepto al consumidor. Nosotros ofrecemos un producto nuevo por lo que necesitábamos un envase novedoso, innovador, pero también funcional». Desde Arluy tienen muy claro que «para competir con las grandes marcas y los grandes productores, nosotros tenemos que diferenciarnos, aportar algo distinto y ese algo viene dado por el producto, pero también por lo que el consumidor ve en el lineal de un supermercado». Tanto Arluy como Ontañón demostraron su aprecio del diseño, pero los profesionales que se dedican a ello lamentan que la mayoría de las empresas no sepa valorar que una forma de distinguirse de la competencia y conseguir un mejor posicionamiento en el mercado puede llegar de la mano del diseño. «En los tiempos que corren, las empresas que más han apostado por el diseño son las que han afrontado la crisis desde una situación más favorable», señala José Manuel -uno de los responsables de Estudiosat- quien añade: «Ese punto a favor es especialmente relevante en el ámbito de la internacionalización. Una forma de diferenciarse de los productos procedentes de Asia -habitualmente más baratos- es por el cuidado diseño que ofrecen algunos de los occidentales».

Módulo ofrece un asesoramiento en diseño de carácter multidisciplinar (gráfico e industrial), por eso Sergio Lumbreras puede hablar desde los dos ámbitos: «En el campo del gráfico se ha avanzado mucho en los últimos años, se ha comenzado a valorar y ahora hay empresas que apuestan por ello, pero en el ámbito del diseño industrial estamos muy retrasados», lamenta. «La figura del diseñador industrial está completamente en desuso en La Rioja. Las empresas a veces la confunden con la del ingeniero. Muchas veces cuando alguien la demanda, se recurre a un ingeniero, pero el no tiene la formación adecuada para realizar ese trabajo».

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