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El portero rumano Stef, en el centro, debutó ayer como jugador del Logroñés aunque no tuvo apenas trabajo. / J. HERREROS
Primeros detalles
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Primeros detalles

El CD Logroñés empata a uno ante el Zaragoza B y echa de menos un delantero

J.L. GARCÍA ÍÑIGUEZ

Domingo, 29 de julio 2007, 04:54

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El CD Logroñés 2007/2008 tiene otro estilo. Se nota el aumento presupuestario, la llegada de mejores peloteros. Aunque, eso sí hay asuntos por pulir. A la salsa del juego blanquirrojo le falta aún bastante maridaje. Pero los detalles buenos, en contraste con lo visto la pasada campaña, resultan muy positivos.

El primero empieza por atrás, por los laterales. En la banda izquierda, Zeki primero y Machote después, se prodigaron ayer en ataque. Quizá más el primero, pero el segundo mostró más potencia y mayor precisión en los centros. Campos, en el lateral diestro, estuvo más discreto. Su lugar en la segunda mitad lo ocupó el juvenil Hervías, que dejó una grata sensación. El centro de la defensa está llamado a ser de los mejores de la categoría. A priori, Setién puede estar tranquilo en cuanto a la zaga.

En el medio campo, Jaume -ayer capitán- se mostró tan batallador como siempre. A su lado estuvo Candelas, que ha retrasado su posición y por delante, Iván Díaz. Un buen jugador éste, muy técnico, pero ayer jugó caminando. Su sustituto, José, estuvo más eléctrico y desequilibrante.

La banda izquierda tuvo de nuevo a Omar como protagonista. Frío en algunos momentos del partido, aunque dejó sus habituales detalles de calidad. Chus López ocupó luego esa posición y apenas pudo hacer nada. El interior derecho fue para Gallego que se mostró como un hombre que aporta algo -en principio, sólo algo- de desequilibrio y sorpresa.

Pero el principal problema del Logroñés está arriba. Ubis, reconvertido en delantero, pelea todo lo que puede. Pero sus características no son las que necesita Setién. A este equipo le faltan uno o dos delanteros. Le falta gol. Y más importante: le faltan ocasiones. Eso, también es cierto, no sólo es culpa de la ausencia de delanteros. Porque ayer también se echó de menos un centrocampista con presencia.

El resultado fue de empate, y eso es lo de menos. El gol del Logroñés llegó en propia puerta tras un centro de Candelas. El tanto maño, a tres para el final, tan sólo puso rúbrica a una aburrida segunda parte. Porque del partido pocas conclusiones se pueden sacar. Sólo fue la primera prueba.

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