El hartazgo vuelve a tomar las calles

La Plaza del Mercado recuperó anoche, un mes después de los 'sanmateos', el ambiente festivo. Miles de personas volvieron a recorrer como entonces la calle Portales, de nuevo poblada de globos y bajo el latido de los cánticos y toques de silbatos, turutas y batukadas. Jolgorio, sí, pero esta vez recubierto con una generosa carga reivindicativa.

El espíritu del 15M resucitó ayer, 15-O, con una movilización mundial en demanda de un cambio global, que en la capital riojana se convirtió en una multitudinaria marcha, entre 5.000 y 6.000 personas, según aseguraron los portavoces de comunicación de Asamblea Logroño, convocante del acto en La Rioja.

Puntual, la manifestación, encabezada por sendas pancartas en las que se leía 'UNIDXS para un cambio global' y 'Por los derechos de todas las personas', partió de la plaza del Mercado a las 20.00 horas. Entre ambos lemas, viajaba un ataúd negro con el cadáver de la democracia en su interior, mientras los manifestantes animaban a los transeúntes y a los ciudadanos sentados en las terrazas al grito de 'Únete, no nos mires'. Entre la marea humana se elevaban decenas de pancartas con frases de indignación, demandas e ingeniosas proclamas como 'PSOE-PP, vuestra sinrazón es nuestra razón', 'Creo más en las hadas que en los políticos, 'Las bancarrotas se nacionalizan las ganancias se privatizan' '¡Ya es hora de que los de arriba manden obedeciendo!' o 'Si vivimos de rodillas es fácil que nos llegue el agua al cuello'.

Protesta pacífica y sentadas

Frases contundentes para ilustrar una protesta absolutamente pacífica, que reunió a personas de toda edad y condición. Algunos no sabían aún ni andar, como Jimena, de un añito, que viajaba en su cochecito que empujaban sus padres, Victoria y César, que explicaron que «hay muchas cosas de la democracia que fallan, que se pueden mejorar y que se deben modificar. La democracia real es la voz de la gente y los grandes poderes no la están escuchando», explicó ella.

Un poco por detrás viajaban dos veteranos matrimonios de 'indignados'. «Hemos venido porque no estamos de acuerdo con la clase de políticos que tenemos. Hay dinero para algunas cosas que no son imprescindibles, pero no para sanidad o los maestros», denunció Ángel.

Con sendos vehículos de la Policía Local en la cabecera y la cola de la manifestación, los miles de indignados solo hicieron dos altos en el recorrido, con sentadas de protesta junto a la fuente de Gran Vía, en el cruce con avenida de La Rioja; y en la confluencia de la calle Bretón con Sagasta, donde se ubican varias entidades bancarias, en cuyos cajeros y cristaleras se colocaron pegatinas y carteles con frases como '¡Este banco engaña y estafa!'.

«No somos mercancía»

Tras recorrer Portales, Murrieta, Gran Vía, avenida de La Rioja, Sagasta y de nuevo Portales, la protesta volvió a desembocar en la plaza del Mercado a las 21.11 horas, donde se dio lectura a un comunicado de Asamblea Logroño del 15M, en el que se denunció que «los poderes establecidos actúan en beneficio de unos pocos, desoyendo la voluntad de la gran mayoría. Hay que poner fin a esta intolerable situación. Unidos en una sola voz haremos saber a los políticos y a las elites financieras a las que sirven que ahora somos nosotros, las personas, quienes decidiremos nuestro futuro. No somos mercancía en manos de políticos y banqueros que no nos representan». «Para que triunfe el mal, solo es necesario que las personas de bien no hagamos nada», advertía el texto en su conclusión.

Desde Asamblea Logroño calificaron de «muy positiva» la manifestación porque «los logroñeses han respondido y el apoyo social existe, en la línea de lo que está pasando hoy en todo el mundo con movilizaciones en casi mil ciudades de más de 90 países».