Malos tiempos para fabricar 'smartphones'

El portavoz del grupo, Louis Woo señaló que los costes laborales habían aumentado a más del doble desde 2010, cuando la empresa se enfrentó a un intenso escrutinio de los medios de comunicación debido a una serie de suicidios de trabajadores. "Básicamente hemos estabilizado nuestra fuerza de trabajo en los últimos tres años", dijo Woo a Reuters. En cuanto a la reducción de la plantilla, "depende del éxito que tengamos en cuanto a la introducción de la automatización de procesos y también de la robótica".

Crecimiento condicionado al de Apple

Desde la empresa aseguran que los planes de reducción no son inmediatos, y que probablemente se traducirán en un descenso de la contratación global. El crecimiento de Foxconn en 2013 cayó al 1,3 por ciento en 2013, frente a los aumentos de dos guarismos registrados cada año de la última década, impulsados en gran medida por el éxito de Apple.

Una de las claves para esta reducción de ingresos es que el precio de los smartphones o tabletas se ha reducido mucho en los últimos años, y la tendencia es que siga siendo así durante el próximo lustro. Según datos de la industria, un móvil de gama media costará en 2018 un 19% menos que hoy en día, que cuestan algo más de 260 euros de media.

"Incluso si la tecnología mejora, el precio todavía seguirá bajando", dijo Woo. "Hemos llegado a aceptar eso y nuestros clientes han llegado a aceptar eso".

La robotización de estas fábricas será la clave para poder mantener los costes laborales bajo control a largo plazo, dijo Woo, ya que la compañía espera empezar a introducir brazos robóticos para hacer las tareas básicas que actualmente son realizadas por los trabajadores.

En la misma situación se encuentra Sony, que según anunció hoy el diario japonés Nikkei planea recortar unos 1.000 puestos de trabajo en su sufrida división de teléfonos inteligentes, a la que la compañía trata de salvar de los números rojos.

Los despidos se producirán, en su mayor parte, en las divisiones de Europa y China del gigante nipón, aunque las cifras definitivas se conocerán a principios de febrero. En los últimos años, Sony ha tenido muchos problemas para ganar algo de cuota de mercado a marcas como Apple o Samsung.