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Cinco trucos para evitar el síndrome de la clase turística

Cinco trucos para evitar el síndrome de la clase turística

En todo viaje de más de cuatro horas se duplica, y hasta triplica, el riesgo de padecer una trombosis venosa profunda, incluso si se hace en coche o autobús

REDACCIÓN

Lunes, 27 de abril 2015, 15:44

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El famoso síndrome de la clase turista, conocida también como la trombosis del viajero, produce alrededor de 150.000 trombosis venosas profundas derivadas de vuelos de larga duración en todo el mundo, lo que conlleva un riesgo de embolia pulmonar y muerte, según el doctor Manuel Miralles, jefe de la Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital La Fe. Durante una conferencia en el XXIII Congreso Nacional del Capítulo Español de Flebología y Linfología (CEFyL) de la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular, celebrado en Valencia en el Hospital Universitari i Politècnic La Fe, ha asegurado que, más que un mito, es una realidad que afecta también a los viajeros que permanecen más de cuatro horas en un autobús o coche.

A la luz de la evidencia científica disponible, se puede afirmar que este síndrome sí es un problema de salud constatable y real, afirma el doctor Miralles, en su intervención Síndrome de la Clase Turista: ¿mito o realidad. Diversos metanálisis sugieren que realizar un vuelo de más de cuatro horas de duración aumenta entre dos y tres veces el riesgo de padecer una trombosis venosa profunda. Esta realidad nos permite identificar los factores de riesgo, lo que redunda en una mejor prevención y, en buena lógica, en una menor mortalidad y morbilidad.

Recomendaciones

Basado en los estudios realizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la Organización Internacional de Aviación Civil, organizaciones europeas de consumidores, la Cámara de los Lores inglesa y diversos trabajos de investigación publicados en Heart, The Lancet, The New England Journal of Medicine, Annals of Internal Medicine, Archives of Internal Medicine, British Journal of Haematology, Thorax, Chest y Phlebology, su estudio ha concluido que está demostrado que afecta a personas que realizan vuelos con una duración de más de cuatro horas, manifiesta el doctor Miralles. Y también en transportes terrestres de igual o superior duración (autobús, tren, coche).

Para evitarlo, el especialista recomienda estas medidas preventivas:

-Usar medias de compresión elástica.

-Levantarse y deambular con frecuencia.

-Si se está sentado, realizar ejercicios de flexo-extensión durante algunos minutos cada hora, moviendo brazos y piernas y levantando la punta de los pies y moviendo los tobillos.

-Beber suficiente agua o zumos.

-Elegir un asiento de pasillo para estirar mejor las piernas y cambiar de postura.

De manera general, no es necesario tomar ácido acetil salicílico o anticoagulantes antes del viaje de más de cuatro horas de duración, señala el doctor Miralles. No obstante, hay que adoptar medidas preventivas cuando se presenta uno o varios factores de riesgo: trombofilia (propensión a desarrollar trombosis), toma de anticonceptivos orales, obesidad, cáncer o haber sufrido una cirugía en las semanas previas al viaje.

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