Borrar
Uno de cada tres accidentes infantiles se producen en verano

Uno de cada tres accidentes infantiles se producen en verano

Insolación, intoxicación, infecciones… en los meses de vacaciones aumentan los riesgos para los menores. La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) da unos consejos para evitarlos

redacción

Viernes, 27 de junio 2014, 17:06

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) recomienda que los padres extremen las precauciones durante el verano, pues la tercera parte de los accidentes ocurren en esta época del año, incluyendo los que tienen desenlace mortal. Estos son los consejos de los expertos:

-Vigilar a los más pequeños en las piscinas. Los niños de entre dos y cuatro años son los que más riesgo presentan de ahogamiento, atragantamientos o quemaduras, según un estudio sobre accidentes, realizado junto a la Fundación Mapfre.

-Memorizar, guardar en los contactos o tener a mano el teléfono al que llamar en caso de emergencia, pues según el mismo estudio el 18% de las familias desconoce a dónde llamar.

-Prevenir las quemaduras solares. Recordar que los rayos ultravioleta aumentan por las propiedades reflectoras de la superficie del suelo. En la playa, por ejemplo, la arena refleja entre un 10% y un 25% de estos rayos, por lo que la exposición de los bañistas es especialmente intensa. Además, durante la etapa infantil y adolescente hay que establecer los hábitos saludables dirigidos a la protección solar y a la prevención del cáncer de piel, quemaduras solares y otras lesiones, dicen los expertos. Hay que fomentar la colaboración mediante campañas escolares y comunitarias que promuevan la prevención de la exposición excesiva a la radiación UV en la infancia y la adolescencia.

-Además de fotoprotectores, usar ropa protectora y gafas.

-Los niños rubios, de ojos azules y con piel clara son los que precisan una fotoprotección más alta. Utilizar un fotoprotector adecuado durante los primeros 18 años de vida puede reducir hasta un 78% el riesgo de cáncer cutáneo en la edad adulta, explican. Está demostrado que el efecto cancerígeno de las radiaciones solares es acumulativo. De forma que las quemaduras solares repetidas se relacionan con el desarrollo posterior de tumores cutáneos, especialmente si las quemaduras se producen en la infancia.

-Cuidar la hidratación y alimentación. Para evitar el golpe de calor y las posibles deshidrataciones, es aconsejable incrementar el consumo de agua en los meses de calor.

-Aumentar la cantidad del consumo de líquidos si se hace deporte o se permanece mucho tiempo al aire libre. Lo ideal es beber agua con frecuencia, antes de tener sed y ofrecerle a menudo a los niños pequeños agua.

-Nunca dejar a los niños solos en los coches al sol o con las ventanas cerradas, ya que es una situación que favorece el golpe de calor.

-Para prevenir intoxicaciones o infecciones intestinales, tomar productos recién preparados, refrigerar comidas si se van a transportar a la playa, beber agua embotellada y evitar comidas con huevos que se deterioren con facilidad.

-En zonas pobladas por insectos, como moscas, mosquitos, tábanos, pulgas, chinches, avispas y abejas), arácnidos (arañas y escorpiones, aplicar repelentes en la piel o la ropa.

-Ante la picadura por medusa, que producen lesiones muy pruriginosas en forma lineal, lavar la herida, sin frotar, con agua salada o suero fisiológico y retirar restos de la medusa.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios