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Una mujer fumando en una terraza.
Los médicos de familia apuestan por aumentar el precio del tabaco para frenar su uso

Los médicos de familia apuestan por aumentar el precio del tabaco para frenar su uso

También denuncian que una mayoría de terrazas de bares y restaurantes incumplen la normativa vigente

Borja Robert

Lunes, 23 de mayo 2016, 14:34

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Pese a que desde la última gran ley antitabaco se han producido avances sustanciales en la reducción del número de fumadores en España, los médicos de familia creen que aún puede hacerse más. Este lunes, la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc) ha dado comienzo a la decimoséptima Semana Sin Humo con una encuesta sobre cómo perciben los españoles las nuevas estrategias que desincentiven el consumo de cigarrillos. Los portavoces de la organización, por su parte, han apoyado el aumento del precio de las cajetillas, la implantación del empaquetado genérico u otros endurecimientos de las normas.

"Somos partidarios de cualquier medida que demuestre eficacia en reducir el número de fumadores; el tabaco es la primera causa de muerte evitable en el mundo", ha recordado el doctor César Minué, coordinador de la Semana sin Humo. Cada año, ha explicado, fallecen unos cinco millones de fumadores en todo el mundo, y entre 50.000 y 60.000 solo en España. Por el humo de otros estiman que 600.000 en total y entre 1.500 y 3.000 personas en España. "Y cuando se ha legislado, ha habido un descenso de la prevalencia".

La encuesta de Semfyc, en la que han participado más de 9.000 personas -casi todas en centros de salud-, permite dar una imagen aproximada de la percepción social del tabaco en España. "No es un estudio científico, pero los resultados son bastante parecidos a los de la Encuesta Nacional de Salud, así que creemos que es razonablemente representantiva", ha aclarado Minué. Entre los participantes, un 18% es fumador activo, un 39% exfumador y el 34% restante nunca ha fumado.

El promedio de consumo entre fumadores, según la encuesta, es de doce cigarrillos diarios. Una inmensa mayoría de los exfumadores lo son de larga duración -dos tercios llevan al menos cinco años sin fumar- y además lograron superar la adicción por sus propios medios, sin recurrir a fármacos u otras estrategias clínicas.

Según los encuestados, la estrategia más efectiva para reducir el número de fumadores sería el aumento del precio de la cajetilla. Casi un 70% de los participantes apoyó esta medida como la más eficaz. Entre los fumadores, dos de cada tres reconoció que si se diese el caso reduciría su consumo, aunque solo un 18% afirmó que intentaría dejar el hábito. "España sigue teniendo uno de los precios más baratos de Europa", ha aclarado Minué.

"Se calcula que si el precio se elevase un 10%, el número de fumadores se reduciría en un 4%, y la cifra aumentaría hasta el 6% entre jóvenes y adolescentes", ha matizado la doctora Encarnación Serrano, que también coordina la Semana Sin Humo.

Empaquetado genérico

Sobre el empaquetado genérico, sin embargo, la sociedad española aún se muestra escéptica. Apenas un tercio la apoya, mientras el resto gravita entre dudar de su efectividad o rechazarla de plano. Pese a esto, Serrano ha asegurado que existen evidencias de su eficacia como elemento disuasorio en países como Australia. "En España hay poca información al respecto, y hasta que no se pone en marcha la gente es más reticente", ha aclarado.

En lo que sí coinciden es en que son muchos los bares y restaurantes que están incumpliendo la ley con su uso de las terrazas para fumadores. "Según un estudio de la OCU, un 87% de las terrazas está fuera de la ley", ha explicado Serrano. Cuando tiene cubiertas al menos dos paredes, ha recalcado Minué, no debe permitirse fumar. "Se cumple razonablemente bien en el interior de bares, restaurantes y centros de trabajo, pero no en las terrazas", ha insistido. El presidente de la Semfyc, por su parte, ha denunciado estas prácticas irregulares y ha reclamado que se cumpla la ley tanto a restauradores como a inspectores.

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