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Detalle del cuadro de Pierre Bonard titulado 'La femme aux deux fauteuils'. / Efe
Halladas dos valiosas pinturas Gauguin y Bonnard robadas en 1970
ARTE

Halladas dos valiosas pinturas Gauguin y Bonnard robadas en 1970

Durante 40 años estuvieron en la cocina de un obrero de la FIAT que los compró en una subasta de objetos perdidos

COLPISA

Miércoles, 2 de abril 2014, 22:05

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Dos valiosas pinturas de Paul Gauguin y Pierre Bonnard, robadas en 1970 en Londres y valorados en decenas de millones de euros, fueron recuperadas por los carabineros italianos tras una rocambolesca peripecia. Los cuadros de los célebres pintores franceses adornaron durante más de 40 años la cocina de un obrero italiano de la FIAT, que los había adquirido en una subasta de objetos perdidos. Se supone que los ladrones los olvidaron en un tren, y tras ser declaradas como objetos perdidos y sin que nadie advirtiera su valor, fueron subastadas. Los cuadros habían sido robados en 1970 de la residencia de una rica familia de Londres, los Mark-Kennedy, cuyos herederos tienen el derecho de "reivindicar su propiedad", según la policía italiana.

"Se trata de obras de arte excepcionales y muy importantes para la historia de la pintura", explicó en una rueda de prensa el general italiano Mariano Mossa, quien estima que la obra de Gauguin vale entre 15 y 35 millones de euros. Titulada 'Frutas en la mesa o naturaleza para el perrito', el cuadro, de pequeñas dimensiones, 49 por 54 centímetros, está dedicado a la condesa de Nimal y fue realizado en 1889 por Paul Gauguin (1848-1903). La obra del maestro postimpresionista, que contribuyó al desarrollo del arte contemporáneo con su estilo exótico, lleva su original sello: un perrito al lado de la firma.

'La mujer con los dos sillones' es el título de la pintura de Pierre Bonnard (1867-1947) y su valor se calcula en unos 600.000 euros. Ilustrador y litógrafo, Bonnard dedicó buena parte de su talento a la publicidad. Su pintura es también de pequeñas dimensiones y fue presentada en el curso de las misma conferencia de prensa por el ministro italiano de Cultura, Dario Franceschini.

Su recuperación ha sido fruto de una peripecia "tan fascinante como increíble, emblema de una trabajo meticuloso y paciente y poco reconocido, para el que se necesitan muchos años", dijo el ministro Italiano al elogiar al cuerpo policial encargado de velar por el patrimonio artístico. "La rocambolesca historia de estos cuadros es digna de una película", comentó Franceschini.

"Olvidados en un tren que cubría el trayecto entre París y Turín", fueron hallados por el personal de la empresa de ferrocarriles italiana, que no se dio cuenta de su valor, contó el general Mossa. Las obras fueron registradas como objetos encontrados y subastados en 1975 en Turín. Un obrero de la FIAT, "apasionado de arte", los compró en la subasta por un valor irrisorio, 45.000 liras italianas de entonces, unos 23 euros de hoy, y "los colgó en la cocina de su casa" como decoración, contó el general. Tras jubilarse, el obrero se trasladó a Sicilia, donde las obras permanecieron durante 40 años antes de ser recuperadas por los carabineros.

No menos "extraordinaria" y algo misteriosa es la peripecia de cómo los carabineros llegaron hasta la cocina siciliana donde estaba las pinturas. A través de fotografías enviadas al cuerpo policial, los expertos llegaron a la conclusión de que se trataba de pinturas de dos grandes maestros franceses. Gracias al mayor banco en el mundo de datos de obras de arte robadas, creado hace 45 años por el cuerpo de carabineros italianos, con 5,7 millones de objetos registrados, se llegó a establecer quiénes eran los autores de esas pinturas.

Los cuadros, que no figuraban como obras robadas, fueron descubiertos cruzando catálogos oficiales de distintos años, ya que aparecían oficialmente en los del año 1964 y habían desaparecido en los del año 2001, pero sendos artículos de junio de 1970 en el New York Times y en un diario de Singapur en los se mencionaba el robo ocurrido en Londres, levantaron las sospechas de los carabineros.

Se prevé una larga batalla judicial para establecer quiénes son los legítimos propietarios de las obras, ya que el obrero siciliano las adquirió de forma legal. El recorrido de las obras, desde el momento en que fueron robadas hasta su abandono en el tren italiano aún no ha sido reconstruido, explicaron los carabineros. "El comercio ilegal de arte es uno de los negocios más lucrativos en el mundo después del de armas, droga y productos financieros", recordó el general Mossa.

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