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Varane (i) y Ramos se ven superados por Llorente. / Alessandro Di Marco (EFE)
Cristiano y Bale no tapan las carencias
FÚTBOL

Cristiano y Bale no tapan las carencias

La especulación de Ancelotti, perseguido por sus planteamientos y la fragilidad defensiva del Madrid, ya provoca incluso críticas del crack portugués

AMADOR GÓMEZ

Jueves, 7 de noviembre 2013, 12:14

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«En la primera parte ante la Juventus fuimos muy defensivos. Todavía estamos mejorando. Podíamos estar mejor en este momento». Las palabras de Cristiano Ronaldo cuestionan el planteamiento de Carlo Ancelotti en Turín, donde el técnico del Real Madrid, al igual que en las derrotas ante el Atlético y el Barça, se encargó de tirar el período inicial con una rácana disposición táctica y una actitud especulativa. «En el primer tiempo estuvimos más pendientes de ellos y sólo reaccionamos después de su gol, algo que nos está ocurriendo últimamente», lamentó Casillas, después de que el equipo, pese a ser el más goleador de la 'Champions' y rozar los octavos como líder de grupo, haya encajado siete tantos en sus tres últimos partidos y continúe ofreciendo malas sensaciones, a remolque y cuando se adelanta en el marcador.

Mientras Ancelotti, superados los 100 días de confianza, sigue a la búsqueda de un estilo y de un equipo tipo (ya lleva 16 alineaciones diferentes en 16 partidos), el Madrid, a falta de fútbol y solidez, vive de un ataque demoledor. Sin embargo, Cristiano y Bale, autores de 12 goles en los choques ante el Sevilla, el Rayo y la 'Juve', no tapan las carencias defensivas ni las críticas internas al entrenador transalpino. Ya hasta su principal valedor, el crack portugués, se revuelve públicamente contra la insistencia de Ancelotti por 'italianizar' al Madrid, dejarse dominar sea cual sea el rival, grande o pequeño, y únicamente presionar más arriba y ejercer autoridad cuando se ve obligado.

Con un sistema al que ya no está dispuesto a renunciar (4-3-3), el Madrid se rompe por el centro y sigue haciendo aguas en defensa, concediendo numerosas ocasiones a los contrarios, como se demostró en sus visitas a Vallecas y Turín, tras un duelo de ida y vuelta sin control reflejado en un 7-3 que encumbró al tridente Bale-Benzema-Cristiano. El devastador triunvirato suma ya en la Liga 21 de los 30 goles del equipo, y en la 'Champions', 11 de 14, después de que el galés que progresa en la recuperación física se haya estrenado también en Europa. Sin embargo, la contención es un suplicio, y las llegadas y disparos de los rivales han ido en aumento, para quedar retratados atrás y obligar a trabajar en exceso a Diego López y Casillas: 16 remates del Sevilla, 21 del Rayo y 24 de la Juventus.

Desplazados

Ancelotti ya no tiene dudas con la disposición de su línea de ataque, con Bale tirado a la derecha y Cristiano en la banda izquierda. Tampoco, una vez restablecido el imprescindible Xabi Alonso, con el guipuzcoano y Khedira en la medular. Las incógnitas surgen ahora en el puesto de interior izquierdo, donde Isco ha sido desplazado, al menos en los partidos de trascendencia, por Modric y Di María, y también en la defensa. Ancelotti no confía en sus laterales derechos (Arbeloa y Carvajal) y al parecer le agrada más Sergio Ramos en ese puesto en el que comenzó en el Sevilla y un dúo de centrales formado por Varane y Pepe. Tras el fracaso de Ancelotti en el Camp Nou al alinear a Ramos como mediocentro defensivo, el jugador de Camas fue lateral en Turín, aunque el entrenador aseguró que esa posición fue «provisional, porque a Ramos le gusta jugar de central».

El italiano ya advirtió la pasada semana de que Di María, damnificado junto a Isco por la llegada de Bale, «puede jugar de vez en cuando en la posición de mediocentro izquierdo», y así actuó en Vallecas el argentino -antes titular por la derecha-, sustituto del galés para afrontar el último cuarto de hora en el Juventus Stadium. A estas alturas de temporada, cuando a Ancelotti le persigue el malestar de dirigentes, jugadores y aficionados, y en ya demasiados casos indignación por el juego del equipo, este Madrid de las dos caras y los bandazos se mueve a impulsos y a los golpes de Cristiano. En la Liga, aunque ya estuvo a punto de despedirse de la lucha por el título en la octava jornada y se salvó a principios de octubre por los goles de última hora de Morata -otro ignorado ahora- y del de siempre, pudiera servirle para mantenerse. Pero en la 'Champions' debe dar bastante más de sí, porque por ahí andan, por sólo citar dos delanteros centro temibles, Ibrahimovic y Lewandowksi, mientras el '9' del Madrid se enciende y apaga con facilidad.

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