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Brittney Griner, en pleno mate. / Archivo
La reina del mate
BALONCESTO

La reina del mate

Brittney Griner asombra en la liga universitaria americana por su facilidad para machacar el aro rival y está llamada a ser una de las mejores jugadoras de la historia

LUISMI CÁMARA

Lunes, 11 de marzo 2013, 09:02

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Ante Tomic sumó doce mates en toda la temporada pasada con el Real Madrid. No parecen muchos para el pívot y sus 217 centímetros. Sobre todo, si lo comparamos con los números de Brittney Griner, la jugadora de la Universidad de Baylor, que ya ha machacado el aro en más ocasiones en esta campaña que el balcánico en su último año de blanco. Pero es que esta chica de 2,03 metros de altura y más de 2,20 de envergadura está llamada a marcar una época en el baloncesto mundial. Con apenas 22 años ya está considerada por algunos como la mejor de mundo y es capaz de hacer cosas nunca vistas en un partido femenino.

Si ya en su periodo en el instituto Nimitz ya asombraba con sus mates, en su actual periplo universitario no ha hecho más que hacer crecer la admiración hacia su calidad y poderío físico. No solo es capaz de hundir el balón en el aro en carrera, también se permite el lujo de recibir en el poste bajo, girarse y machacar sin ni siquiera botar la pelota.

Griner es un prodigio de coordinación y potencia y ha convertido en habitual lo que hasta hace bien poco era una excepción. Lisa Leslie, la mejor jugadora de la historia fue la primera que realizó un mate en la WNBA, la mejor liga del mundo, en 2002; Candace Parker lo fue en la competición universitaria americana en 2006 y hubo que esperar hasta los pasados Juegos Olímpicos de Londres para ver cómo la australiana Liz Cambage lograba el primer mate en la categoría.

Precisamente, la elegida como la mejor deportista de 2012 por la ESPN renunció a un oro seguro con Estados Unidos por cuestiones personales en una controvertida decisión, aunque tiempo habrá para conseguirlo. Ya campeona de la NCAA con Baylor, su próximo reto será repetir triunfo y dominar la liga americana tras su seguro número uno en el 'draft'.

Algunos ya hablan de ella como la más grande de todos los tiempos cuando apenas ha comenzado a dar sus primeros pasos (con un 50 de pie, eso sí de ahí su apodo de 'Big Foot'), y se especula con la posibilidad de que se la primera en poder jugar con los hombres, aunque ella misma lo descarta.

No sería el primer intento. Ya en 1980, cuando la NBA intentaba salir adelante apoyándose en jóvenes talentos como 'Magic' Johnson y Larry Bird y en provocadoras iniciativas, la base Ann Mayer llegó a entrenar en Indiana con los Pacers durante unos días, pero no llegó finalmente a debutar con el equipo.

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