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Kate Beckinsale vuelve a embutirse en cuero en 'Underworld: Evolution'
Kate Beckinsale vuelve a embutirse en cuero en 'Underworld: Evolution'
cine | Entrevista

Kate Beckinsale vuelve a embutirse en cuero en 'Underworld: Evolution'

La actriz británica estrena este viernes la segunda parte de la película de acción dirigida por su esposo Len Wiseman

COLPISA | LOS ANGELES

Jueves, 2 de febrero 2006, 01:00

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Kate Beckinsale se ha puesto de nuevo en manos de su marido, el director norteamericano Len Wiseman, para protagonizar la secuela de Underworld, que este viernes se estrena en toda España. La bella actriz británica de ojos rasgados, que conoció a su esposo rondando la primera parte de esta película de vampiros y hombres lobo, decidió un buen día abandonar sus estudios de literatura rusa y francesa en la Universidades de Oxford y la Sorbona para dedicarse a la interpretación en Hollywood. Tras debutar en 1993 con Mucho ruido y pocas nueces, de Kenneth Branagh, ha participado en títulos como La tabla de Flandes, Pearl Harbor y más recientemente en El aviador, de Martin Scorsese.

- ¿Qué tal fue el rodaje de esta segunda parte de Underworld?- Fantástico. Con la primera no me divertí tanto, pero en esta era amiga de todo el equipo, volvía a un personaje que ya conocía y además estoy casada con el director. En este negocio es importante saber donde pones los pies y yo sabía donde me metía al hacer Underworld 2.

- Dicen que su marido es bastante autoritario detrás de la cámara...- Es cierto. La primera vez que rodé a sus ordenes estaba aterrorizada, pero esta vez yo era la que mandaba (risas).

- Hábleme un poco de su personaje.- Es muy distinto a los que suelo interpretar. Me intimidaba el hecho de hacer una película de acción, que no tiene nada que ver conmigo, pero lo fui superando.

- ¿Tuvo que exigirse mucho físicamente para hacer el papel?- Con la primera solo hice ballet y lo pase muy mal así que en esta ocasión decidí tomármelo mas en serio. Me tuvieron que enseñar a correr, a sujetar una pistola, la coreografía de las peleas. Pero ha sido divertido.

- ¿Embutirse en un traje de cuero tiene su truco?- El problema fue que no debería haberme puesto el mismo traje que la otra vez porque hay ciertas partes de mi cuerpo que no se han mantenido tan bien como me hubiera gustado. Solo espero que cuando cumpla 43 años no me hagan ponérmelo por tercera vez, porque mi trasero no va a ser el mismo. Me preocupa que la gente comente como he cambiado con el paso del tiempo.

- En la película tiene una escena de sexo con Scott Speedman su ex y padre de su hija y delante de la cámara de su actual marido. ¿No es demasiado morboso?- Len es un director muy preciso y sabe donde quiere que se coloque cada actor. Para todos fue un momento difícil esa escena pero estaba bien coreografiada y supimos ser todos lo suficientemente profesionales como para salir ilesos emocionalmente. Se que Scott estaba viviendo un infierno en ese momento. Yo me encontré bien, no tenía que preocuparme si mi pene estaba en el sitio correcto o no como le sucedió a Scott (risas), sobre todo teniendo a mi marido grabándolo todo.

- ¿Es verdad que hizo un streaptease para la cámara de su marido durante el rodaje de esta película?- Si es cierto. No suelo hacer muchas bromas, pero alguien me sugirió la idea de hacer un streaptease para mi marido frente a una cámara y mandárselo. Me pareció una gran idea y lo hice, pero fue un baile sin mucho rigor.

- ¿Se le ha subido a usted el éxito a la cabeza?- Rodar películas no me hace sentir una celebridad si es a eso a lo que se refiere. Mi vida continua como siempre. De todas maneras pensar en la fama me hace sentirme incomoda, los estrenos, los programas de televisión, no me gusta esa presión. Sufro cuando me presento en público y creo que jamás seré capaz de presentar un premio. Como mujer trato de ser crítica conmigo misma en mi trabajo y en mi vida personal disfruto al máximo cada instante de privacidad, porque es algo maravilloso. No voy a fiestas, no voy a bares, no salgo a estrenos, tal vez el próximo año todo eso sea diferente.

Estudiar el personaje

- ¿Qué siente al verse en la gran pantalla?- Odio verme a mi misma en la pantalla. No me gusta nada verme en el cine, ni en la televisión ni en el video.

- ¿Por qué?- No lo sé. Supongo que es lo mismo que sienten muchas personas cuando oyen su voz en la grabadora o en el contestador. Mis películas no son mis favoritas. Veo mi trabajo solo una vez y nunca lo vuelvo a hacer.

- ¿Tiene alguna manía al comenzar un rodaje, alguna superstición para que todo salga bien?- En realidad no. Tengo un estilo de trabajo muy estricto, me gusta estudiar el personaje, meterme en su piel, en su contexto y el ritual no necesariamente es el mismo. Eso es lo que me gusta de este trabajo que no hay un estilo a seguir, no hay monotonía, cada proceso depende del tipo de historia que se va a representar.

- ¿Quiere decir que no es una mujer neurótica?- Tengo todas las neurosis posibles, pero no necesariamente tengo que tocarlo todo antes de empezar una película. (risas).

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