Secciones
Servicios
Destacamos
Domingo, 19 de noviembre 2017, 23:13
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
El presidente del Gobierno hizo un llamamiento a las empresas para que no abandonen Cataluña y al conjunto de los ciudadanos de España para que eviten los llamamientos al boicot y «nunca dejen de consumir productos catalanes». El objetivo que ha de buscarse tras la aplicación del artículo 155 es, en efecto, el cierre del conflicto catalán con unas elecciones que representen el definitivo arbitraje de la ciudadanía. Para lograr recuperar los equilibrios perdidos y evitar que la crisis económica se convierta en verdadera recesión, hay que sujetar los impulsos y abandonar la tentación del boicot, que, según los estudios realizados, ha alcanzado una envergadura inquietante. El boicot produce un daño injustificado y casi siempre injusto a muchas personas e intereses -trabajadores directos e indirectos, intermediarios, accionistas, etc.- que nada tienen que ver con el problema, al tiempo que estimula insanos resquemores que no pueden regir los destinos de una sociedad civilizada. Vuelvan, pues, las aguas a su cauce, y regresen el 'seny' y la fraternidad que siempre han caracterizado la instalación de Cataluña en España.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.