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ATLAS ESPAÑA
Martes, 5 de junio 2018, 16:45
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Según la queja que han presentado sus padres, un alumno de nueve años lleva desde Octubre sin salir al recreo. Es el castigo que, según cuentan, le impuso la profesora de Música por no presentar un trabajo. Dicen que se enteraron al ver al niño triste, que nadie del centro les informó. La inspección educativa ha abierto un expediente informativo. Según los expertos, un castigo tan prolongado deja de tener valor educativo. Para que una sanción sea útil debe ser justa, corta y lo más cercana posible en el tiempo al momento en que se produce el hecho que queremos corregir.
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