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R. C.
MADRID.
Viernes, 16 de febrero 2018, 00:42
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El Tribunal Supremo ratificó la nulidad de las subvenciones por importe de 3,8 millones concedidas entre 2002 y 2006 por el entonces director general de Trabajo de la Junta de Andalucía, Francisco Javier Guerrero, a la empresa Matadero de la Sierra Morena en el marco de los ERE fraudulentos. Esta decisión del alto tribunal conlleva la obligación para la mercantil de devolver a las arcas públicas el total del dinero cobrado indebidamente.
El Supremo constata en este caso «la grosera omisión» de los trámites elementales que deben seguirse para dar una subvención pública, que se concedió «sin más base ni soporte que la decisión del citado director general».
El alto tribunal estima un recurso de la Junta de Andalucía y revoca la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, de 15 de septiembre de 2015, que había dado la razón a la empresa contra la resolución de 2 de septiembre de 2013 de la Consejería de Economía andaluza, que había declarado nulas las resoluciones de la Dirección General de Trabajo y Seguridad Social por las que se concedieron las ayudas fraudulentas.
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