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La oposición en bloque aprueba el derribo de la 'ley mordaza'

El Congreso, con el único voto en contra del PP, acuerda tramitar las proposiciones del PSOE y del PNV para acabar con la polémica norma

MELCHOR SÁIZ-PARDO

Miércoles, 22 de marzo 2017, 00:41

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Madrid. La Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana tiene sus días contados. El Pleno del Congreso, con los votos en bloque de la oposición, convirtió ayer a la controvertida 'ley mordaza' en un enfermo terminal al que solo falta poner fecha de defunción. La Cámara baja, con los únicos votos en contra del Partido Popular entre las grandes formaciones, aprobó la toma en consideración de las proposiciones del PSOE (177 votos a favor, 131 en contra y 33 abstenciones de Ciudadanos, fundamentalmente) y del PNV (211 a favor y 130 en contra) para reformar la controvertida norma.

  • Hipermulta.

  • Hasta 600.000 euros de multa por convocar sin comunicar manifestaciones en instalaciones de servicios básicos.

  • Parlamentos.

  • Protestar en las inmediaciones del Congreso, el Senado y los parlamentos autonómicos con hasta 30.000 euros.

  • Fotos.

  • Sanciones por el uso «no autorizado de imágenes o datos personales o profesionales» de las fuerzas de seguridad.

  • Expulsiones en caliente.

  • El PP trató de legalizar las deportaciones exprés en las vallas de Ceuta y Melilla en un anexo de la ley.

A pesar del acuerdo de ayer, el camino hacia la nueva ley que regule los derechos, libertades y obligaciones de los ciudadanos en las calles será largo. Probablemente, meses. Aunque toda la oposición apoya la desaparición de la ley que promovió la mayoría absoluta popular hace solo 20 meses, hay muchos matices entre los grupos. Y los dos textos que pasan a fase de ponencia se enfrentarán a un aluvión de enmiendas. Y no solo del PP. Los más combativos prometen ser los diputados de Unidos Podemos. La portavoz parlamentaria de este grupo, Irene Montero, ya avisó ayer que su apoyo a la tramitación de los textos no es, ni mucho menos, una carta blanca, ya que la formación morada no quiere, como aboga al menos momentáneamente el PSOE, volver a la «ley Corcuera» y a la «patada en la puerta». Aspiran a una ley más blanda que la que estuvo en vigor hasta 2015.

El portavoz del PP, Rafael Hernando, fue el encargado de anunciar el voto negativo de su grupo a los dos textos. Y eso, a pesar de que el propio ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido -ayer ausente en el Congreso- había alabado públicamente en el Senado la propuesta del PNV. No obstante, los populares, sabedores de que el actual texto está condenado a muerte, tendieron la mano a la oposición para salvar los muebles. Rafael Hernando dijo que, en la fase de enmiendas, su grupo buscará un acuerdo para cambiar «lo que no ha funcionado» y para mantener lo que «ha funcionado» porque -insistió- «la ley ha sido buena para mejorar la seguridad en nuestro país». El PP y el Gobierno -explicaron fuentes parlamentarias- siguen pensando que el texto de los peneuvistas sigue siendo un «buen punto de partida» para «hablar», como ya dijo Zoido.

Desde el PSOE se celebró la victoria de la votación que servirá para «quitar la mordaza definitivamente», según dijo el portavoz socialista, Antonio Hernando, que recordó que ya le advirtieron al Gobierno de Mariano Rajoy «que si él no quitaba la mordaza, se le quitaríamos nosotros». Hernando pidió a Rajoy que no se agarre otra «pataleta» y que no amague con convocar elecciones después de este nuevo varapalo parlamentario.

Los socialistas, que recurrieron ante el Constitucional el texto, y, sobre todo, Podemos ya dejaron entrever ayer que solo habrá un acuerdo con el PP si éste se aviene a desmontar (algo improbable) los principales ejes del vigente texto que, según la oposición, vulnera una docena de preceptos constitucionales, entre ellos los derechos de reunión, manifestación, a la dignidad e intimidad de las personas, a la información o a la tutela judicial efectiva.

«Ingrata tarea»

«No podemos seguir condenando a los policías a continuar con la ingrata tarea de colocar la mordaza que nos impone este Gobierno», clamó el socialista Antonio Trevín, quien pidió al PP que se «olvide» de la actual ley porque el PSOE aspira a un «amplio acuerdo» en el que cabrían los populares. También aplaudió Trevín el «impecable» texto del PNV, en indisimulado guiño a los nacionalistas.

El ponente del PNV, Mikel Legarda, abogó por buscar un «equilibrio justo entre libertad y seguridad», y avanzó que su grupo, que propone 44 cambios a la ley, cree imprescindible reformar algunos de los preceptos como los controles en la vía pública, los registros corporales o las sanciones a los medios de comunicación.

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