El Constitucional anula la prohibición de las corridas de toros en Cataluña

Según fuentes jurídicas, el Constitucional señala que Cataluña tiene competencias para regular los espectáculos públicos y para proteger a los animales, pero la tauromaquia ha sido declarada por el Estado patrimonio cultural, por lo que su prohibición invade competencias del Estado en materia de cultura. El alto tribunal se basa en dos leyes aprobadas por el Gobierno central, una en 2013 y otra en 2015, que no fueron recurridas, con las que declaró los toros patrimonio cultural inmaterial.

El Gobierno catalán ya ha avanzado que no cumplirá la sentencia y que diga lo que diga el Constitucional los toros no volverán a Cataluña. La última corrida se celebró el 25 de septiembre de 2010 en la plaza de la Monumental de Barcelona, la única que quedaba abierta en Cataluña. La sentencia del Constitucional puede provocar una nueva tormenta política en Cataluña, en pleno proceso soberanista y pleno pleito juidicial entre el Gobierno central y el autonómico.