Toyota Hilux

Otra novedad es que las versiones GX y VX, con motor 2.5 D-4D de 144 CV, incorporan un nuevo diferencial trasero que el conductor puede bloquear manualmente, lo que supone una mejora para la conducción fuera del asfalto. Al bloquear el diferencial, el eje trasero se convierte en un eje rígido en el que se transmite el par por igual entre cada rueda, lo que garantiza la capacidad de tracción con solo un mínimo de adherencia en una de las dos ruedas posteriores. Este es un sistema que permite solucionar las pérdidas de tracción en el eje trasero en condiciones de escasa adherencia.

El bloqueo del diferencial trasero se activa mediante un interruptor que hay en la consola. Para poder conectarlo es necesario accionar primero la reductora. El sistema funciona por debajo de 8 km/h y su activación implica desconectar el ABS y el control de estabilidad. Este mecanismo implica que esas dos variantes GX y VX, dejan de llevar el diferencial trasero de deslizamiento limitado (LSD), un elemento que ya no está disponible en ningún Hilux.

Los nuevos Toyota Hilux llevan de serie llantas de 17 pulgadas, de chapa en las versiones GX y de aleación ligera en las VX y VXL. En las variantes GX de Cabina Simple (dos plazas) y Cabina Extra (2 + 2) los neumáticos son de medida 225/70 R17 mientras que en todas las versiones de Cabina Doble (2 + 3) que corresponde a los tres niveles de equipamiento existentes, GX, VX y VXL, los neumáticos son de medida 265/65 R17.

Además, desde hace unos meses, todas las versiones de Hilux cuentan con tapicería de color negro. Las versiones GX y VX llevan tapizado de tela mientras que el VXL se ofrece con tapicería de piel.

A pesar de las novedades de equipamiento, los precios de la gama Hilux no suben. Así, el Toyota Hilux está disponible en los concesionarios de la marca desde 25.000 euros, si se opta para uso no comercial.