Secciones
Servicios
Destacamos
PPLL
Lunes, 9 de enero 2017, 00:01
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
El número de víctimas mortales en accidentes de tráfico -según las cifras oficiales de la DGT que contabiliza el número de fallecidos en las primeras 24 horas del accidente-, repunta tras trece años de descenso más o menos acelerado.
A fecha de 21 de diciembre, o sea, antes de iniciarse las navidades (unos días tristemente trágicos por la cantidad de accidentes mortales que se producen tradicionalmente), habían perdido la vida en las carreteras 1.135 personas, cuatro más que en todo 2015, lo que ya supone un crecimiento del 2 por ciento más, a falta de que acaben las fiestas.
La siniestralidad de 2016 está lejos de los 5.399 muertos, tanto en vías urbanas como interurbanas, de 2003, pero supone un cambio de tendencia que preocupa a los expertos en seguridad vial. Por meses, en 2016, las cifras de víctimas mortales sólo fueron inferiores a las registradas en 2015 durante mayo y septiembre, noviembre. Los meses más trágicos fueron agosto, con 130 fallecidos (17 más que el mismo mes del año anterior); julio, con 124 (once más); junio, con 100 (18 más) y marzo, con 100 (20 más).
Además, las previsiones para los próximos días no hacen nada halagüeñas las expectativas, porque aunque no se espera que las condiciones climatológicas empeoren en el tramo final de las navidades, la Dirección General de Tráfico (DGT) había previsto más de 16,7 millones de desplazamientos durante las fiestas que acabarán con el retorno a casa tras el día de Reyes. Unos viajes en los que, debido a las fiestas, muchos conductores se pondrán al volante con unas copas de más. A eso se añade que una buena parte de estos trayectos se efectuará por carreteras convencionales, sin doble carril y donde no existe separación entre ambos sentidos, lo que puede agravar las consecuencias en caso de colisión.
Ni el aumento de la presencia los radares fijos, de los móviles y de los 'Pegasus' en los helicópteros, ni las cámaras que detectan a los usuarios que no utilizan el cinturón de seguridad, ni las repetidas campañas de control de drogas y alcohol al volante han hecho disminuir la mortalidad.
Respecto a las causas de este incremento, a la espera de que la DGT ofrezca un estudio pormenorizado, todo parece indicar que el final de la crisis económica ha incidido en un aumento de los desplazamientos, lo que ha llevado aparejado un incremento de las posibilidades de sufrir un siniestro.
Asimismo, la Dirección General de Tráfico viene apuntando con insistencia como otra causa al envejecimiento del parque automovilístico, en el que más del 10 por ciento de los vehículos ya supera los diez años de antigüedad, y, por lo tanto, tiene menos medidas de seguridad pasiva. Así, según sus datos, los vehículos implicados en un accidente mortal tienen un edad media de 13,5 años.
Finalmente aparecen dos problemas más: el mantenimiento de los vehículos, que se ha ido alargando por motivos económicos, y la falta de mantenimiento de las infraestructuras, que han sufrido también los recortes presupuestarios.
Voto de confianza
Ante estas dramáticas perspectivas, el presidente de la Asociación DIA de Víctimas de Accidentes, Francisco Canes, advierte de que «las cifras de víctimas mortales no se pueden ni se deben maquillar, ahora mueren más personas en las carreteras que hace doce meses. Tampoco se puede vivir de las rentas, ni de los aciertos del pasado. Con un balance de fallecidos en accidentes peor que el del año pasado la DGT debe hacer autocrítica».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El juzgado perdona una deuda de 2,6 millones a un empresario con 10 hijos
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.