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Miguel Caro, rodeado de familiares, amigos y representantes municipales y regionales, ayer durante el Día del Vecino. ::
Toda una vida «haciendo ciudad»

Toda una vida «haciendo ciudad»

Miguel Caro, pionero del asociacionismo de barrio, nombrado 'Vecino del año'

Jonás Sainz

Domingo, 7 de mayo 2017, 00:31

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Miguel Caro, uno de los pioneros del asociacionismo vecinal en Logroño, recibió ayer la distinción de Vecino del año 2017 por toda una vida «haciendo ciudad», como le dijo la alcaldesa Cuca Gamarra al entregarle la placa conmemorativa. Fue durante la celebración del 28º Día del Vecino, que organizan la Federación de Asociaciones de Vecinos (AAVV) de La Rioja y el Ayuntamiento de Logroño, a mediodía de ayer en la plaza del Mercado.

Día de sol y viento, folclore y degustación, día de fiesta vecinal en definitiva, pero también de emoción encarnada en la figura de Miguel. Este logroñés, muy conocido en el ámbito vecinal de la ciudad, participó hace más de cuarenta años en la fundación de la asociación de Lobete y actualmente es vicepresidente de la de Yagüe. Además ha estado siempre vinculado a la propia Federación de AAVV y fue, como recordó su presidenta, María Ángeles Matute, una de las personas «que tuvieron la iniciativa de celebrar esta fiesta del vecino». «Ha sido siempre -dijo- muy importante por su trabajo, su constancia, su iniciativa y su armonía, además de ser, ante todo, una buenísima persona».

La alcaldesa, por su parte, agradeció a Miguel su dedicación y capacidad «para trasladar al Ayuntamiento las necesidades de los barrios y así hacer ciudad entre todos». «Siempre ha buscado el interés general, poniendo en ello lo mejor de sí mismo», señaló Gamarra antes de concluir que «este es el premio del cariño, el cariño de todos tus compañeros y de todos los vecinos de Logroño».

«A todos mis compañeros»

Miguel, acompañado por su esposa Resu, su familia y amigos, respondió desde el escenario con emoción, gratitud y palabras de recuerdo «a todos los compañeros» que empezaron con él en Lobete y a los que encontró después en Yagüe, los dos barrios logroñeses a los que ha dedicado su trabajo vecinal en todos estos años. «Estoy muy emocionado y muy agradecido», reconoció luego a este diario y, a pesar de excusarse por estar convaleciente de una operación, tuvo fuerza para animar a todos a participar en las asociaciones de vecinos: «Tiene que ser así porque si no esto sería un desmadre».

La propia Federación de AAVV aprovechó el acto para la reivindicación de una forma de tomar parte activa en el día a día de la ciudad y en la toma de decisiones. En un manifiesto expusieron sus principales demandas: dar más importancia a los presupuestos participativos y que se ejecuten sus propuestas sin tener que estar vigilando que así sea; promover el trabajo de la red vecinal contra la violencia de género; y reclamar la colaboración entre las distintas administraciones para mejorar las comunicaciones de la ciudad.

También la alcaldesa hizo un llamamiento a los vecinos para que se impliquen a través de las asociaciones en un trabajo que, aseguró, aporta «mucha sensatez y sentido común» y desempeña «un papel decisivo en el progreso de Logroño».

Y después de los discursos y las fotos, la fiesta: con el grupo de danzas de Yagüe, Plus Ultra y Los Lunares Flamenco, además de hinchables, talleres infantiles y Tragantúa al pide de La Redonda. Y para terminar, una buena degustación de champiñón y un sincero brindis a la salud de Miguel Caro, nuestro mejor vecino.

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