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Logroño gasta un millón al año en reparar actos vandálicos e incívicos

Logroño gasta un millón al año en reparar actos vandálicos e incívicos

No sólo son pintadas, contenedores dañados y bancos rotos... también están los chicles que se tiran y pegan al suelo o los vertederos ilegales

Javier Campos

Sábado, 7 de marzo 2015, 21:20

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No es que vaya a más, pero lo cierto es que los niveles alcanzados, que prácticamente se repiten cada año, siguen obligando a echar cuentas... muchas cuentas. Todo acto genera una consecuencia, resultado, efecto o reacción, y lo cierto es que tanto el vandalismo como el incivismo mantienen en jaque a la administración más cercana, en este caso, la local. «Es lo que tiene no cuidar lo público, patrimonio de todos», concluye el concejal de Medio Ambiente, Jesús Ruiz Tutor.

Acciones vandálicas y actuaciones incívicas obligan al Ayuntamiento de Logroño a gastar alrededor de un millón de euros anuales, una partida no presupuestada pero que hay que ir habilitando según se van produciendo aquí y allá. Durante el 2014, al igual que en los ejercicios anteriores, no hubo barrio que no registrase la acción de los gamberros y de los no tan gamberros.

Y es que, como bien recuerda Ruiz Tutor, no sólo es esta pintada ni ese contenedor quemado ni aquel banco roto... también es tirar un chicle al suelo o deshacerse de los escombros generados en el cambio de la bañera por un plato de ducha en el descampado más a mano.

Los datos, facilitados por la Concejalía de Medio Ambiente año tras año de manera aproximada precisamente por la complejidad del fenómeno y ante las dificultades para cuantificar el mismo con exactitud por ejemplo, mientras el precio de una papelera o de un contenedor está claro, no sucede lo mismo con el coste de la limpieza de una pintada pues depende de muchos factores, e incluso en el primer caso quedan fuera posibles daños colaterales como afecciones a los vehículos más cercanos cuando arde un contenedor, siguen reflejando que tanto los actos vandálicos como las actitudes incívicas se vienen manteniendo pese a los llamamientos municipales y las campañas de concienciación.

Lo que se gasta en...

  • haciendo números

  • Limpieza

  • Pintadas

  • 116.840 euros fue el coste estimado de la limpieza de 876 pintadas en el 2014, frente a las 1.274 del 2013.

  • Chicles 59.068 euros fue el coste del servicio de limpieza en cuestión, donde se estima que en un año se pueden llegar a quitar entre 158.400 y 237.600 chicles entre 600 y 900 al día.

  • Cartelería 638 euros en su eliminación en distintas zonas de la capital.

  • Limpiezas extraordinarias Hogueras de San Juan, 1.021 euros; fiesta paralela de universitarios, 1.021 euros; fiesta de Barras, 4.214 euros...

  • Basuras

  • Vertederos ilegales/vertidos incontrolados 55.918 euros por la recogida de 1.763 metros cúbicos.

  • Vandalismo

  • Contenedores quemados 61.200 euros por los 68 contenedores sustituidos por actos vandálicos, 7 menos que en el 2013 cuando el gasto se elevó a los 67.500 euros.

  • Daños en parques y jardines 29.924,06 euros para reparaciones en un total de 371 puntos, siendo los meses con más actuaciones marzo, con 46, y julio, con 40.

  • Lo más habitual Bancos rotos, reposición de vallados, elementos de los juegos infantiles (tornillería, columpios...), recambio de aspersores...

  • Lo más caro Reparar puentes y postes quemados en el parque del Iregua, 1.000 euros; reponer las chapas de acero de la pista de skate de Las Norias, 850 euros; reposición de aspersores de la margen izquierda del Ebro, 651 euros.

0,35 por cada chicle

Ahí está el caso de los chicles para ilustrarlo a la perfección, cuyo mayor problema es que en menos de seis meses de su última limpieza, «vuelven a estar igual que cuando comenzó su eliminación». Teniendo en cuenta que el coste anual de este servicio es de 59.068 euros, el coste por metro cuadrado limpio es de 5,98 euros y, estimando un promedio de 17 chicles por metro, el gasto medio para las arcas municipales por chicle limpiado viene a ser de 0,35 euros... ¡cuando una goma de mascar cuesta entre cinco y diez céntimos!

Si algo escenifica el vandalismo en el paisaje urbano, eso serían los contenedores que aparecen dañados semanalmente. 2014 ha sido un año malo, según Medio Ambiente, «si bien mejorando algo los datos del año anterior». La última memoria anual de la Dirección General refleja que durante el pasado ejercicio hasta 68 contenedores resultaron quemados frente a los 75 del año anterior, en cualquier caso una gracia que salió por 61.200 euros, 662.400 por los 736 acumulados desde el 2004.

También las pintadas servirían de ejemplo al vandalismo puro y duro... 876 pintadas en el 2014, con un coste de 116.840 euros, si bien en el 2013 fueron 1.274 y tanto en el 2012 como en el 2011 superaron las 2.000. Y eso sin contar las zonas con murales pintados permanentemente en la rotonda de Chile, el paso inferior del Camino de Santiago, la bajada al parque del Ebro por General Urrutia o la pasarela sobre el Ebro del Rincón de Julio.

Entre enero y diciembre, además, no hubo parque o jardín de la capital que no registrase daños: bancos, farolas, juegos infantiles, vallados, aspersores... Reparaciones, reposiciones y limpiezas se suceden a diario pues se contabilizan por centenares. Resumiendo: casi 30.000 euros de coste para las arcas municipales evitables, según Medio Ambiente. «Y eso que no somos de las peores ciudades», apunta Ruiz Tutor, quien se queda con la idea de que, al menos, «no vamos a peor, y en el 2014 hubo detalles que arrojan algo de luz a tan oscuro panorama».

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