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Eulen y Ayuntamiento conocían irregularidades desde el año 2012

El fiscal acusa a la empresa de no tomar medidas hasta que la situación afloró en agosto de este año

A. GIL

Jueves, 8 de mayo 2014, 14:35

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Al margen del escrito de acusación contra los tres imputados, el fiscal deja constancia expresa de que la empresa Eulen, concesionaria del servicio de guardería en régimen de concesión municipal -también lo es de las de El Cubo y El Arco-, conocía desde el 1 de agosto del 2012 «la existencia de disfunciones e irregularidades en la organización y llevanza de la escuela y, si bien no consta llegara a saber con certeza que hubiera acciones tan graves, no abordó adecuadamente los problemas que se apuntaban, difiriendo su solución hasta que la situación afloró y explotó en agosto del 2013».

La Fiscalía refiere también un suceso del 26 de septiembre del 2012, en que una señora alojada en el Hotel Conde de los Andes vio un zarandeo «contundente y desproporcionado» hacia un niño en el patio de Casa Cuna y llamó a la Policía para denunciarlo. De aquella denuncia tuvo también conocimiento el Ayuntamiento de Logroño, a quien «corresponde el control e inspección del servicio», recuerda el fiscal en su escrito.

De hecho, el propio Ayuntamiento expedientó por otra parte a Eulen también en el año 2012 por el caso de una agresión de un niño a una niña, después de que la monitora responsable se ausentara de su puesto de trabajo, caso que se cerró con una multa de 750 euros.

La investigación policial del caso fue desvelada por Diario LA RIOJA en agosto del año pasado, después de que un grupo de padres pusiera en conocimiento de la Policía y de la propia concejal de Familia, Paloma Corres, sus sospechas de maltrato hacia los niños. Los padres -que luego abandonaron la Casa Cuna con el inicio del pasado curso escolar al reclamar sin éxito a la concejal la suspensión cautelar de la concesión a la empresa o al menos de las trabajadoras- habían sido alertados por una de las monitoras, que les aconsejó que sacasen a sus hijos de la guardería y cuyo testimonio, precisamente, ha sido sobre el que se sustenta el caso judicial.

Después de aparecer los hechos en Diario LA RIOJA, y ya iniciada la investigación policial, el Ayuntamiento abrió un nuevo expediente a Eulen por falta «grave» o «muy grave» que conllevó, entonces sí, la suspensión cautelar de su empleo de las tres trabajadoras acusadas. Dicho expediente está en suspenso mientras se desarrolla la investigación judicial a la espera de lo que determinen los tribunales.

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