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C.N.
LOGROÑO.
Martes, 10 de octubre 2017, 23:53
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«Nos daban de comer en cuencos de perros, nos hacinaban a diez en literas en una habitación, en un nave sin condiciones» y eso cuando tenían un sitio donde dormir. Muchas noches las pasaron al raso después de horas de duro trabajo. Este es el testimonio de Yasser Ricardo Oteo, un temporero gallego que ha trabajado en la reciente vendimia en La Rioja subcontratado por «una mafia portuguesa», asegura.
Precisamente, su caso y el de otros temporeros fueron denunciados ayer públicamente por el secretario general de la Federación de Industria, Construcción y Agro (FICA) de UGT-Rioja, Carlos Alfaro, quien alertó de la subcontratación de estos trabajadores por parte de «intermediarios y mafias que actúan sin cumplir la obligación de dar alojamiento».
En una rueda de prensa explicó las «irregularidades» con las que «intermediarios engañan a los temporeros y a los agricultores para quienes trabajan. En concreto, se refirió a Yasser Ricardo Oteo y a la cuadrilla que este año se trasladó de su Galicia natal a La Rioja para vendimiar. «Fueron engañados por contratantes portugueses que les ofrecían trabajo para diferentes agricultores, tanto en La Rioja como en Álava». Detalló que nada más llegar a la estación de autobuses de Logroño, a las once de la noche, les trasladaron a una empresa de trabajo temporal (ETT) donde firmaron el contrato. Y pese a que el agricultor para quien iban a trabajar dijo que había pagado a la ETT para que les alojara, durmieron cinco noches a la intemperie. Todo ello, teniendo en cuenta que en el artículo 24 del convenio colectivo agropecuario de La Rioja se indica expresamente que el agricultor está obligado a proporcionar alojamiento al trabajador empleado. Una responsabilidad que en este caso recaía de forma subsidiaria sobre la ETT.
Durante su estancia en esta comunidad, los temporeros, además, «fueron coaccionados y amenazados por sus subcontratantes», apuntó Alfaro. Unas condiciones lamentables que sufrieron pese a que «pensaban que al venir a una comunidad con denominación de origen no se encontrarían con esta cruda realidad».
Tras denunciar los hechos, a través de UGT, a la Policía Nacional y a la Ertzaintza -porque también trabajaron para agricultores alaveses- e Inspección de Trabajo, los temporeros se pusieron en contacto con los servicios sociales de Logroño y, gracias a la colaboración de Cáritas, regresaron a su ciudad de origen.
Por su parte, la responsable del sector agrario de UGT-FICA, Ana Vaquero, recordó que estas «irregularidades en la contratación durante la campaña de la vendimia» incumplen el artículo 24 del convenio colectivo agropecuario de La Rioja.
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