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Educación pone en marcha un proyecto contra el acoso en 23 centros de la región

La Consejería formará a 150 profesores para contar en cada centro de la región con al menos un docente que sepa actuar en un caso de 'bullying'

LUIS J. RUIZ

Lunes, 24 de octubre 2016, 23:32

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Durante el curso pasado, La Rioja registró once casos de acoso escolar en las aulas. Cinco de ellos fueron en Primaria; seis, en Secundaria. Estadísticamente, vino a decir Abel Bayo, consejero de Educación, es un porcentaje mínimo, pero un único caso, dijo, es ya demasiado. «Un sólo caso es objeto de nuestra atención», sentenció el titula de Educación. Por eso, y después de descartar la implantación del programa finlandés KiVa contra el acoso escolar cuya puesta en marcha se anunció el pasado mes de febrero, la Consejería de Educación ha decidido iniciar desde el próximo mes de noviembre dos proyectos piloto contra el acoso escolar en las aulas: uno diseñado para los alumnos de Primaria y otro para los de Secundaria. El proyecto se pondrá en marcha en 13 centros de Primaria y en 10 de Secundaria, si bien, apuntó el Consejero, se podrá elevar el número de participantes hasta los 25 centros educativos.

Los dos programas tiene dos puntos comunes de partida: trabajar desde la prevención e involucrar a toda la comunidad educativa, desde profesores, hasta alumnos pasando por los padres e incluso contando con el personal de administración y servicios de los centros. El objetivo, explicó Antonio Mendaza, subdirector general de Ordenación Educativa, Innovación y Atención a la Diversidad, es «dotar a los centros educativos y a los miembros de la comunidad educativa de medios y herramientas que les permitan, de forma eficaz, la prevención, detección y respuesta ante este tipo de casos». Además, en el caso de los centros de Secundaria, se prestará especial atención a 'ciberbullying', el acoso a través de las diversas plataformas 'online'.

Maite Gil, directora del Centro de Innovación y Formación Educativa, detalló que el tipo de formación que recibirán los alumnos variará en función del proyecto. «Hay una parte común que todos los que participen recibirán y que es la formación al profesorado sobre qué es el acoso escolar, cómo intervenir, qué características tiene, como diferenciarlo respecto a otros problemas de convivencia, qué papel juegan los distintos implicados... Además hay formación para el claustro de profesores y otra específica para el equipo directivo. En cuanto a los alumnos, participarán en jornadas de sensibilización para que identifiquen estas situaciones, se hagan responsables de sus conductas y para que sepan actuar si se ven inmersos en estas actuaciones».

Participación del alumno

En relación a este último punto, Bayo destacó que una de las grandes apuestas de los proyectos es la formación de alumnos voluntarios «para que participen en estrategias de ayuda entre iguales. Es importante que el alumno se sienta parte de la estrategia porque entre ellos los códigos del lenguaje los controlen mejor. Es importante que los propios alumnos sean parte de la solución».

Además, según explicó Antonio Mendaza, los dos proyectos se completarán con un curso semipresencial que pretende formar a otros 150 docentes en seguridad, responsabilidad y protección de menores con el objetivo de que «haya en cada centro de la región al menos un profesor que pueda actuar en estas situaciones».

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