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La Unidad de Ictus reduce la mortalidad en un 66,7% en los primeros días

837 pacientes han sido ingresados en el Hospital San Pedro en la unidad de la planta de Neurología que se inauguró en julio de 2014

JUDITH ARRILLAGA/J.E.

Miércoles, 27 de julio 2016, 23:43

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logroño. La consejera de Salud, María Martín, junto a los doctores José Miguel Acitores y María Eugenia Marzo se reunieron ayer en el hospital San Pedro para valorar los resultados y el funcionamiento de la Unidad de Ictus, cuya andadura comenzó hace justo ahora dos años.

El balance que realizaron se basa fundamentalmente en un estudio clínico que ha comparado dos grupos de 150 pacientes cada uno. Los primeros fueron tratados por ictus agudo en la planta convencional de Neurología en el año 2013, mientras que los segundos estuvieron ingresados en la Unidad de Ictus el pasado año 2015. Los resultados muestran una mejoría en todos los parámetros en los pacientes que estuvieron en la unidad, destacando la reducción de la mortalidad en los primeros días en un 66,7% y una mejora significativa en la recuperación para las actividades diarias a los tres meses.

La puesta en marcha de la Unidad de Ictus implicó una adecuación de los sistemas de organización asistencial y de la dotación del hospital. «Se ha constatado la mejora de la calidad asistencial y la celeridad tanto en el pronóstico como en el tratamiento, ambos fundamentales a la hora de atajar esta patología», aclaró la consejera de Salud.

Por la Unidad de Ictus, ubicada en la planta de Neurología, han pasado 837 pacientes desde su puesta en marcha en el 2014. La mayoría de los ingresos (un 92 %) han sido por obstrucción de vasos sanguíneos. De ellos, 826 siguieron en el propio hospital el tratamiento indicado.

Alrededor de unos 700 pacientes al año sufren esta patología en La Rioja. «Lo que se pretende es hacer un tratamiento basado en la evidencia. El paciente está monitorizado 24 horas al día a nivel cardiológico y se siguen unos protocolos muy estrictos», explicó Marzo, jefa de la sección de Neurología del San Pedro. «Esta unidad ha puesto en marcha un dispositivo para que los pacientes sean diagnosticados mucho antes», añadió.

El ictus es la segunda causa de muerte en mujeres y la primera en hombres. Además, «en los casos en los que no supone el fallecimiento del paciente deja unas secuelas importantes en muchos casos y el sufrimiento del paciente y la familia es horrible», añadió Marzo.

Tras analizar los resultados del estudio, tanto los doctores como la consejera han llegado a la conclusión de que la implantación de la unidad ha mejorado la calidad de la atención, la celeridad del tratamiento y el pronóstico del paciente con ictus.

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