Borrar
El riojano Adolfo de Villarroya, segundo por la izquierda. :: A. V.
Villarroya y 'Los Cuatro de Asís'

Villarroya y 'Los Cuatro de Asís'

Un grupo de jóvenes franciscanos buscó en la canción una nueva forma de evangelizar

MARCELINO IZQUIERDO VOZMEDIANO

Domingo, 7 de febrero 2016, 21:50

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Los 60 fueron años de cambio, también en la Iglesia Católica. Con el viento a favor que había representado en el Concilio Vaticano II, un grupo de jóvenes franciscanos buscó en la canción una nueva forma de evangelizar, de comunicar la palabra de Dios a través de la música. Así surgió el grupo 'Los Cuatro de Asís', en los albores de 1966, de cuyo nacimiento se cumple ahora medio siglo. El sacerdote riojano Adolfo de Villarroya fue uno de sus artífices y compositor de la 'Yenka de San Francisco', un religioso que por aquel entonces se pinchaba en emisoras de Mallorca, Barcelona, Madrid y hasta de Logroño.

Adolfo Pérez Jiménez, que cuando ingresó en la orden franciscana cambió su nombre por el de Adolfo de Villarroya -pues en esa localidad riojabajeña vio la luz en 1941-, estudió en el Seminario de la capital riojana y en el monasterio arnedano de Nuestra Señora de Vico, hasta que el destino lo llevó a Palma de Mallorca.

Fue en la isla balear donde Villarroya trabó amistad con otros frailes aficionados a la música. Además del propio Adolfo, Joaquín Tébar, Francisco Escanelles y Antonio Mullet decidieron crear 'Los Cuatro de Asís', un conjunto de música ligera, influido por el pop y una balbuceante . El impacto provocado por estos cuatro jóvenes con sus hábitos talares y cantando como si actuaran en la película 'Fray Escoba' o en un musical de Broadway fue enorme. Pronto se multiplicaron las galas por Mallorca y Barcelona, sus actuaciones en directo a través de la radio, e, incluso, la revista 'Semana' les dedicó una doble página con gran despliegue gráfico.

«¡Hasta nos ofrecieron ir de teloneros con Antonio Machín! Pero la cosa no cuajó», recuerda Adolfo de Villarroya, quien conserva aquellos discos grabados. Entre las muchas versiones y temas compuestos, uno de ellos llamó poderosamente la atención: 'La Yenka de San Francisco', como homenaje al , y que comenzaba de esta guisa:

«Cuentan que Francisco / el santo humilde y manso / cuando reprendía por no obedecer / cuentan que Francisco / daba a sus hermanos / esta santa regla para obedecer: / izquierda, izquierda, derecha, derecha, delante, detrás, un, dos, tres».

La aventura de 'Los Cuatro de Asís' llegó a su fin dos años más tarde, debido a las obligaciones pastorales y misioneras de los jóvenes frailes.

Continuaría fray Adolfo ligado al mundo de la música como cantautor, sobre todo durante la Transición, lo que le llevó a actuar por diversos escenarios de la geografía riojana y de otras provincias españolas.

Hoy en día, Adolfo Pérez Jiménez disfruta de una vida eremítica en Villarroya.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios