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Ignacio Espinosa durante la entrevista. :: díaz uriel
«En La Rioja seguimos necesitando dos jueces más»

«En La Rioja seguimos necesitando dos jueces más»

El responsable judicial riojano señala que el principal problema de los juzgados de lo Penal reside en el gran número de sentencias sin ejecutar

M. DELGADO

Martes, 4 de agosto 2015, 23:40

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Ignacio Espinosa, presidente del TSJR, asegura que en España hay una carencia de magistrados muy importante: «En nuestro país hay unos 10 jueces por cada 1.000 habitantes, la media en Europa es de 20», recalca. La necesidad se extiende a La Rioja y por ello insiste en que una de las principales demandas del órgano que preside son dos nuevos jueces.

Estamos muy por debajo de la media europea en el número de jueces, ¿por qué resulta necesario aumentar el número de jueces en La Rioja?

En el TSJR nos haría falta un juez por cada sala de las que funcionan con dos, porque lo normal es que las salas sean de tres magistrados y aquí trabajamos con dos. Las salas del TSJ están funcionando bien porque todos los días le prestamos un juez. El problema es que estamos mandando a diario a un magistrado a un lugar que no es el suyo.

¿Y habría que aumentar el número de juzgados en La Rioja?

Desde el año 2012 estamos venga a pedir un juzgado de lo Penal, porque se necesita urgentemente. Tiramos con el 'pequeño remedio' de una juez de refuerzo, nombrada por el Ministerio de Justicia, que nos está echando una mano. Sin embargo, en septiembre se va esta magistrada, y aunque mandaremos a otro nuevo, ya no será una persona especializada que lleva desde hace tanto tiempo haciendo estas tareas.

¿Dónde está el principal problema de los juzgados de lo Penal?

El problema reside en que montones de sentencias todavía no han sido ejecutadas. El Juzgado de lo Penal es importante no sólo porque se castiga a la gente que comete el delito, sino que detrás hay una cuestión monetaria de indemnizaciones que deben ser ejecutadas para el beneficio de la víctima.

Uno de los datos más reseñables de la memoria del TSJ de La Rioja es que estamos por debajo de la media en el número de denuncias de Violencia contra la Mujer, ¿cómo se valora eso?

Como casi siempre. Esto es bastante positivo porque se traduce en menos delitos, y sobre todo menos delitos tan sangrantes. De hecho, otro dato positivo que habría que destacar es que ha pasado mucho tiempo sin que haya muertes por este tipo de violencia en La Rioja.

Sobre la corrupción, ¿son los delitos más complicados de perseguir?

Por supuesto, son los más complejos que hay. Primero, porque no se hacen a la luz del día donde otros puedan ser testigos. Desde el primer momento tratan de no dejar huellas. Estos delincuentes disponen de muchos medios. En ocasiones participan mafias transaccionales, por eso se tuvo que crear la Audiencia Nacional. Muchas veces se trata de perseguir un delito que trasciende del ámbito nacional ya que tienen por medio paraísos fiscales.

¿Qué medios humanos o materiales se necesitarían para perseguirlos?

Para atraparlos es muy importante la colaboración internacional de organizaciones como la Interpol y de otros países, pero también de los propios paraísos fiscales, muchas veces reticentes a colaborar. Serían necesarios los materiales de los que disponen ellos. Son delitos tan complejos que toda la maquinaria estatal tiene que ponerse a la altura. Los delincuentes van por delante nuestro, hacen falta expertos de toda materia y por eso muchas veces funciona tan lento.

Dejando a un lado el tema de la corrupción, ¿qué tal van las obras del nuevo Palacio de Justicia?

Yo creo que de momento se están cumpliendo los plazos. Las obras van bien, pero luego lo que más cuesta es amueblarlo todo y hacer el traslado, que lo haremos poco a poco. Como mínimo, en movernos todos seguro que perdemos todo un mes. Lo primero que trasladaremos, fundamentalmente, serán los Juzgados de lo Social, porque son los únicos que tenemos ahora alquilados y estamos pagando. Se está diciendo que para finales del mes de enero llegaremos, a ver al final qué pasa.

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