Borrar
Ceniceros mira a Sanz en los pasillos del hemiciclo. :: j.r.
«El pacto con Ciudadanos será asumido en su integridad»

«El pacto con Ciudadanos será asumido en su integridad»

Ceniceros reconoce que hubiera preferido un acuerdo de Gobierno, aunque asume la posición de C's y avanza que los puntos recogidos serán la nueva «hoja de ruta»

E. SÁENZ

Jueves, 2 de julio 2015, 13:04

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La segunda sesión del pleno de investidura mantuvo el tono edulcorado que marcó un día antes la puesta de largo de José Ignacio Ceniceros con su programa de gobierno. El candidato del PP a la Presidencia de La Rioja agradeció a los cuatro portavoces la actitud por eludir la tensión más allá de expresar la diferencia de posiciones y, en esa línea, se afanó en multiplicar los gestos de acercamiento saludando a cada diputado.

Un agradecimiento que se visualizó especialmente (como también ha sido norma desde el inicio de la negociaciones) hacia Diego Ubis y el resto de los diputados de Ciudadanos. Ceniceros llegó al punto de reconocer su interés en que el acuerdo con C's no se hubiera limitado a facilitar la investidura, sino que hubiera sido más ambicioso y fuera incluso de gobierno. «Para fiscalizar al Ejecutivo hay que tomar distancia», arguyó Ubis en la dúplica. El expresidente del Parlamento se comprometió en cualquier caso a asumir «en su integridad» el documento que sella la confianza mutua. «Será la hoja de ruta del nuevo Gobierno», abundó para expresar así «que se puede recuperar la política y su prestigio».

Una perspectiva antagónica a la de Podemos, que a través de Cantabrana calificó de «pacto de despachos» el acuerdo entre PP y Ciudadanos, a quienes acusó de ejercer como «los viejos partidos bisagra» y subirse al autobús del poder. «Veremos la realidad más allá de noviembre», vaticinó en alusión a los movimientos en función de las elecciones generales.

Para Concha Andreu, el acuerdo de investidura sufre «mal de altura» por lo genérico y ha derivado en «un discurso de investidura que padece de melancolía». Y prolongando las dudas expresadas al inicio de intervención, la portavoz socialista las extendió a posibles «intereses creados» en el acercamiento de Ciudadanos. «En saber si cuánto hay de verdad y cuánto de táctica en las palabras que adornan las decisiones», agregó.

Por parte del PP, Carlos Cuevas metió en el mismo saco a PSOE y Podemos -«sus críticas a los socialistas sólo son un teatrillo», espetó a Cantabrana- afeando que desde el minuto uno renunciaran a sentarse con los populares. Una «actitud impropia» en un nuevo escenario que obliga al consenso y que C's sí ha sabido interpretar.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios