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Ruiz Vidal, en un partido con el Balsamaiso.
«Un chico callado, introvertido»

«Un chico callado, introvertido»

Buen estudiante y jugador de fútbol, así le recuerdan docentes y entrenadores

L.J.R.

Miércoles, 1 de octubre 2014, 22:41

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«Un chico normal». Esa es la frase tópica de todo suceso, la de la incredulidad de quien conocía (con mayor o menor intensidad) al presunto -en este caso él mismo, con su confesión, ha renunciado a esa condición- autor de los cinco apuñalamientos que cometió el pasado lunes, 22 de septiembre, en las calles de Lérida.

Alejandro Ruiz Vidal es logroñés. Nacido y criado, al menos hasta su salto a la universidad, en las calles de la capital riojana. «Un chico normal», reiteran quienes le ponen, sino cara, sí, al menos, nombre.

Dos son los ámbitos en los que más destacó. Por un lado, y como exige el reto de acceder a un puesto en cualquier facultad de Medicina, en los estudios. El Bachillerato lo cursó en el IES Cosme García de Logroño, junto al polideportivo Las Gaunas. Allí los profesores le recuerdan como «un chicho normal», de los que no dan guerra. Uno más en el medio millar largo de alumnos del IES y al que, sobre todo, recuerdan por sus calificaciones. «Era un alumno brillante, con muy buen expediente académico. De sobresalientes», recuerda el equipo directivo del centro.

El segundo frente en el que brilló fue en el centro del campo de los estadios riojanos. Alejandro Ruiz Vidal supo compaginar el fútbol con los libros y lo hizo para destacar también con el balón en los pies.

Pasó, primero, por el Balsamaiso juvenil; después, por el Valvanera, en el que llegó a jugar cinco partidos en División de Honor. «Era muy introvertido. No hablaba casi nada. No puedes decir que fuera un trasto. Pasaba muy desapercibido», reiteran desde los equipos de fútbol. «Nada hacía pensar que pudiera hacer esto».

Tampoco hizo gala de su ideología. Ningún comentario; ningún símbolo externo que se correspondiera con, por ejemplo, lo que localizaron los agentes de los Mossos d'Esquadra en su habitación del piso de Lérida. Según informaron ayer diversos medios, en el piso en el que residía durante el curso se encontraron numerosas fotografías, posters y otros objetos de ideología neonazi.

En marzo del 2013, después de haber presuntamente acuchillado en el Parque del Carmen a un joven colombiano, Alejandro Ruiz Vidal fue uno de los miembros que firmaron, en su caso como vocal, el acta de constitución de la Asociación Cultural y Deportiva Nueva Época Logroño, a la que se ha vinculado en varias ocasiones con agresiones de tinte ideológica que ellos siempre han rechazado. Ruiz Vidal ya no forma parte de la dirección de la organización de la que, aseguran «fue expulsado».

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