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Seguidores de Erdogan enarbolan banderas turcas durante el acto electoral protagonizado por Yildirim. :: Wolfgang Rattay / reuters
Erdogan busca el apoyo de la diáspora turca en Alemania

Erdogan busca el apoyo de la diáspora turca en Alemania

Envía al primer ministro Yildirim para convencer de la reforma constitucional al casi millón y medio de emigrantes que conservan la nacionalidad

J. C. BARRENA

Domingo, 19 de febrero 2017, 01:09

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berlín. Pese a las fuertes críticas de destacados políticos alemanes, aunque tolerado por el Gobierno y las autoridades del estado federado de Renania del Norte-Westfalia, el primer ministro turco, Binali Yildirim, protagonizó ayer un acto político ante mas de 8.000 compatriotas en la localidad germana de Oberhausen para promocionar el voto a la reforma constitucional de su país. Dos meses antes del referéndum en Turquía y bajo el lema de 'Quien ama a su país vota SÍ', Yildirim defendió una reforma que concederá mayores poderes al presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y que amenaza, según sus críticos, con socavar los fundamentos de la democracia parlamentaria.

El acto de carácter privado convocado por el partido gubernamental turco AKP obligó a un fuerte despliegue policial ante las contramanifestaciones convocadas ante el pabellón König Pilsner Arena de esta localidad ubicada en la cuenca minera del Ruhr. Cerca de un millar de personas, muchas de ellas de origen kurdo, expresaron en la calle su rechazo a la introducción de un sistema presidencialista en su país. En Alemania viven mas de 2,5 millones de ciudadanos de origen turco, de los que 1,41 millones tienen derecho de voto en Turquía por conservar su nacionalidad.

La intervención de Yildirim dio lugar a duras críticas, alimentadas también por la detención y encarcelamiento en Estambul esta semana del corresponsal del diario conservador alemán 'Die Welt', Deniz Yücel, acusado de pertenecer a una organización terrorista. El presidente de Los Verdes germanos, Cem Özdemir, denunció que «el estado de excepción decretado por Erdogan no solo le permite encarcelar a informadores críticos, sino presionar también a los corresponsales extranjeros». Yücel cuenta con la doble nacionalidad alemana y turca. «Resulta grotesco que el primer ministro turco carezca de escrúpulos para abusar de nuestra democracia a la vez que él y sus secuaces se dedican a encerrar entre rejas a los opositores», dijo Özdemir, diputado alemán también de origen turco.

En parecidos términos se expresó el presidente de los liberales, Christian Lindner, quien comentó en referencia a Yildirim que «no se puede uno remitir a la libertad de expresión» para hablar en Alemania «a la vez que se reprime ese derecho fundamental en su propio país».

Por su parte, la líder del partido de La Izquierda acusó al Gobierno federal de «someterse de nuevo al dictado de Erdogan» por permitir la celebración de un acto político protagonizado por su primer ministro. Desde la sección alemana de Reporteros sin Fronteras se condenó además la detención del corresponsal de 'Die Welt' y se exigió su inmediata liberación.

'Hackers'

«Yücel investigaba un ataque de 'hackers' contra el ministro de Energía turco, Berat Albayrak, y eso no es un delito, sino su obligación profesional», subrayó a su vez la gerente de la Asociación de la Prensa Alemana (DJV), Cornelia Hass. Desde el Ministerio de Exteriores se subrayó que «hacemos todo lo posible para apoyar al señor Yücel».

La detención del periodista germano-turco fue abordada también por la canciller federal, Angela Merkel, con su colega turco, Binali Yildirim, en el encuentro que mantuvieron con motivo de la Conferencia de Seguridad en Múnich. Steffen Seibert, portavoz de Merkel, señaló que esta exigió un trato justo del periodista y que se permita que sea asistido por la embajada de Alemania en aquel país.

Mientras tanto, desde el fallido golpe de estado en Turquía el pasado julio ha aumentado drásticamente el número de ciudadanos otomanos que ha solicitado asilo político en Alemania. En una respuesta del Gobierno federal a una interpelación parlamentaria de La Izquierda se subraya que el número de peticionarios de asilo de nacionalidad turca se ha incrementado desde el pasado verano en un 60%. Entre ellos se encuentran varias decenas de militares turcos de alta graduación que hasta hace poco prestaban servicio en organismos de la OTAN emplazados en Alemania y cuyo retorno a su país ha sido exigido por el gobierno de Ankara. Los militares afectados temen ser encarcelados al retornar a casa como sospechosos de estar implicados en el frustrado golpe.

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