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Rivera deja Venezuela sin ver a López

El líder de Ciudadanos, invitado por los opositores al Gobierno de Maduro, logra hablar, pero no reunirse, con el líder de Voluntad Popular

MILAGROS LÓPEZ DE GUEREÑO

Jueves, 26 de mayo 2016, 00:37

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Albert Rivera concluyó su visita de 36 horas a Venezuela sin haber cumplido su objetivo de entrevistarse con Leopoldo López y otros presos políticos, esos que no existen para el Gobierno de Nicolás Maduro, pero que están en prisión domiciliaria. Rodeado de destacados opositores, por quienes había sido invitado, y grandes medidas de seguridad, se entrevistó con el líder destacado del antichavismo Henrique Capriles, con diputados y con familiares de detenidos.

Hasta la prisión donde cumple condena el fundador de Voluntad Popular llegó Rivera acompañado por la madre de López y su esposa, Lilian Tintori, quien también lo acompañó en toda su estancia en Caracas. «Hemos estado en Ramo Verde, pero el Gobierno no me permitió visitar a @leopoldolopez. Sin libertad no hay democracia», escribió Rivera en Twitter. Pero si pudo «hablar por teléfono un par de minutos con @leopoldolopez, y lo escuché más fuerte que nunca. Un líder lleno de dignidad y valentía», agregó.

De su encuentro con Capriles, al que regaló su libro 'El cambio sensato', señaló que ambos están «convencidos de que el revocatorio es el camino para abrir una nueva etapa en Venezuela». El gobernador de Miranda, que perdió las presidenciales frente a Maduro en 2013 por una diferencia mínima, siempre ha defendido la salida institucional de Maduro y el chavismo. De hecho se distanció de López, Antonio Ledezma -actualmente en prisión domiciliaria- y María Corina Machado cuando convocaron en 2014 el plan 'La Salida' para derrocar al mandatario desde la calle. La protesta se desbordó, más de 40 personas murieron y el Gobierno apresó al esposo de Tintori como responsable de esa violencia.

Sin embargo, en este momento Capriles, junto al conglomerado de partidos y agrupaciones que integran la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), lleva la iniciativa de presionar con marchas y manifestaciones -la mayoría prohibidas por el Ejecutivo- la convocatoria de la consulta contra el sucesor de Hugo Chávez. Según la Constitución que con tanto mimo se redactó bajo el influjo del fallecido fundador del chavismo, se puede citar a un revocatorio al cumplirse la mitad de un mandato.

Rivera contactó con la exdiputada María Corina Machado, a la que definió como «una mujer valiente y digna». Y en la noche del martes, hora de Venezuela, intentó visitar a Antonio Ledezma, el exalcalde de Caracas. Llegó hasta el domicilio pero las autoridades, a quienes había solicitado permiso para subir, le prohibieron la entrada al edificio. Lo mismo sucedió con Daniel Ceballos, el exalcalde de San Cristobal, quien también cumple prisión domiciliaria por el mismo cargo que Ledezma: «conspiración contra el Estado». Pero Ceballos pudo asomarse a la ventana para saludar a Rivera y gritar «Libertad».

Como epílogo de su viaje Rivera confesó: «Me voy triste, resignado, pero con la convicción de poder seguir luchando (...) A mí me hubiese encantado conocer a Antonio Ledezma y Daniel Ceballos, esperemos que Venezuela tenga un gobierno democrático que no encarcele a los líderes políticos, sino que compita con ellos en las urnas», dijo.

Por el revocatorio

Por otra parte, Henrique Capriles amenazó ayer con más protestas hasta lograr que se celebre el referéndum revocatorio para acortar el mandato de Nicolás Maduro como presidente, que expira oficialmente en 2019. Cientos de personas participaron en una marcha hacia la sede de la Corte Segunda de lo Contencioso Administrativo, en Caracas, para desafiar el fallo que prohíbe manifestarse frente al Consejo Nacional Electoral (CNE).

«El objetivo de hoy se ha cumplido: entregamos el documento en rechazo a la sentencia de la Corte Segunda de lo Contencioso Administrativo», dijo Capriles, a la cabeza de la protesta «Las próximas movilizaciones las estaremos anunciando», dijo. El gobernador de Miranda subrayó que, si el Poder Judicial y el CNE «cumplen con la Constitución», el pueblo venezolano «no tiene por qué movilizarse», pero hasta que eso ocurra, «no hay ninguna sentencia que impida exigir respeto del artículo 72» de la Carta Magna.

Capriles recalcó que se trata de «una lucha desigual», porque «el Gobierno tiene tanques, camiones, fusiles e instituciones». «Pero si todos los venezolanos nos unimos y nos movilizamos, no habrá cúpulas ni poder que pueda con la fuerza del país», confió. La MUD ha convocado en las últimas semanas varias manifestaciones para aumentar la presión sobre el CNE.

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