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AGENCIAS
Martes, 23 de diciembre 2014, 00:24
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El primer ministro belga, Charles Michel, fue ayer objeto de un ataque de varias feministas del movimiento Liliths, que le arrojaron patatas fritas y mayonesa mientras participaba en una conferencia. Al grito de «Fuera austeridad, Michel, vete», las jóvenes interrumpieron al jefe del Gobierno cuando tomaba la palabra en una charla con empresarios en el Círculo de la región de Valonia, en Namur, al lanzarle un cucurucho de patatas fritas -símbolo gastronómico belga- y rociarle con salsa.
La acción, que ni siquiera fue intuida por los servicios de seguridad, pretendía denunciar cómo «el modelo social se destruye en nombre de una competitividad absurda que deja el bienestar de la población a la puerta de los ministerios», según un comunicado de Liliths.
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