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Una nube de humo negro se eleva sobre la central eléctrica de Gaza después de una intensa noche de bombardeos sobre la Franja.
Israel deja a Gaza sin luz

Israel deja a Gaza sin luz

El Ejército destruye la única central eléctrica de la Franja

MIKEL AYESTARAN

Miércoles, 30 de julio 2014, 00:28

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La lista de «objetivos terroristas» de Israel en Gaza es cada vez más amplia y a ella se sumó la única central eléctrica de la Franja. El ataque israelí a la planta provocó una nube de humo que durante horas se elevó al cielo de Gaza y envió el mensaje a los ciudadanos de que si hasta ahora no tenían pocos problemas de electricidad -había apenas tres horas al día- ahora están condenados a la oscuridad absoluta y a depender de los generadores para largo tiempo.

Por las noches las operaciones militares se intensifican, los israelíes han pedido por segunda vez a miles de personas que dejen sus casas y busquen refugio lejos de la frontera, pero tampoco los centros urbanos son seguros. Además de la central eléctrica, Israel bombardeó la casa de Ismail Haniye -aunque sabía perfectamente que el líder de Hamás no estaba allí-, mezquitas, el Ministerio de Economía o las oficinas del canal Al-Qasa, a quien acusa de «instigar al odio contra Israel», según el parte del Ejército. La oleada de ataques dejó al menos cien muertos, la jornada más sangrienta desde el inicio de la operación 'Margen protector'.

Los hospitales también se han convertido en hogar provisional para familiares de los heridos que no pueden regresar a sus casas. Los padres de Rami Al-Helo cuidan de su hijo de cuatro años. Hablan en voz baja porque no quieren que el pequeño sepa que su abuelo ha muerto y su hermano se debate entre la vida y la muerte en la mesa de operaciones. Rami jugaba en un parque próximo al hospital Al-Shifa el lunes a media tarde cuando el lugar fue atacado. Hubo diez muertos, de ellos ocho niños. «Huimos de Shejaiya y nos metimos en una escuela de la ONU, salieron apenas unos minutos con su abuelo a comprar unos dulces porque era el día de Eid (final del ramadán). ¿Por qué nadie para esto? ¿A qué espera la comunidad internacional?», se pregunta el padre de Rami con desesperación.

Rumores de tregua

Cada familia tiene su tragedia particular, víctima de esta ofensiva o de las anteriores. Mientras en la Franja el clima era de extrema violencia, las informaciones sobre nuevas treguas volvieron a escena, aunque sobre el terreno ya nadie las tiene en cuenta. A media tarde Abed Rabo, secretario del Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) informó de que las facciones palestinas estaban dispuestas a aceptar un alto el fuego «inmediato y una tregua humanitaria de 24 horas», pero Hamás no tardó en desmarcarse. «La declaración de Abed Rabo no refleja la postura de la resistencia. Consideraremos un alto el fuego cuando Israel se comprometa también y tengamos garantías internacionales», declaró el portavoz islamista en la Franja, Abu Zuhri, en un mensaje enviado a los medios.

El siguiente anuncio de tregua llegó de los medios israelíes que, citando fuentes oficiales, aseguraron que ambos bandos estaban dispuestos a aceptar un acuerdo basado en la vía abierta por Egipto, pero en pocos minutos llegó el desmentido. Pese a la presión internacional la tregua no llega y en Israel los sectores más duros piden que, además de los túneles, la operación se extienda hasta lograr un acuerdo que contemple el desarme de Hamás. Los islamistas, aunque ya no lanzan tantos cohetes como en los primeros días, mantienen el pulso y exigen garantías internacionales sobre el final del bloqueo. Ambos lados tienen sus condiciones para detener las hostilidades y quieren mostrarse victoriosos ante su público.

Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, afirmó ayer no estar preocupado por la avalancha de críticas contra él vertidas en la prensa de Israel, donde se le acusa de favorecer a Hamás, e insistió en que su historial proisraelí está fuera de toda duda. «Ya me han vapuleado antes en la política», declaró el jefe de la diplomacia de EEUU, quien ha tratado de mediar en el conflicto y defiende un alto el fuego inmediato que permita resolver los problemas de fondo. Kerry ha sido también objeto de críticas constantes por intentar involucrar a Catar y Turquía en las negociaciones, países a los que Israel ve como sólidos partidarios de Hamás.

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