La justicia ve justificado el fichaje del cuñado de Rato

La última es la pieza relativa a la contratación por Bankia, durante la presidencia del exministro de Economía, de quien fuera su cuñado, Santiago Alarcó. La Fiscalía Anticorrupción sospecha que pudo ser una especie de 'pelotazo' encubierto, pues fue duplicando anualmente sus emolumentos tras ser nombrado asesor externo en mayo de 2010 con un sueldo de 120.000 euros.

Sin embargo, los magistrados que han revisado esa parte de la investigación concluyen ahora que «no existen indicios para afirmar la existencia de un perjuicio» para las arcas del banco y, por tanto, no cabe tipificar su fichaje como delictivo. «No parece en absoluto», apuntan, que el arrendamiento de sus servicios fuera «ficticio o simulado». Al contrario, consideran que resultaron «reales» y, «según parece», incluso «muy cualificados».

Para ello se basan en el testimonio de Carlos Stilianopoulus, exresponsable de banca mayorista de Bankia, quien dijo que él y Alarcó eran «los únicos con conocimientos suficientes sobre riesgo de mercados» en el comité de activos y pasivos. Esgrime la Audiencia, además, que el banco ha manifestado que «no sabe si ha sufrido perjuicio» por su contratación, ni ha aportado «información» sobre si su retribución era exagerada comparada con tareas parecidas.

Los magistrados, no obstante, sí dejan la puerta abierta a que Alarcó sea investigado por un delito de blanqueo, junto a Rato, por la vinculación con su entramado patrimonial.