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El ministro de Hacienda en funciones, Cristóbal Montoro, durante una intervención en el Congreso de los Diputados. :: Zipi / efe
El déficit del Estado se dispara en julio un 20% y los ingresos no remontan

El déficit del Estado se dispara en julio un 20% y los ingresos no remontan

El desfase se sitúa en el 2,66%, ocho décimas más que el objetivo pactado, y se mantiene el desplome de un 38% en Sociedades

DAVID VALERA

Jueves, 1 de septiembre 2016, 00:26

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La desviación del déficit del Estado, lejos de mejorar, se agravó en julio al dispararse un 19,6% y alcanzar los 29.842 millones. Es decir, el desfase entre ingresos y gastos aumentó en 4.895 millones en comparación con el mismo periodo del 2015, según los datos publicados ayer por Hacienda. De esta forma, el déficit de la administración central se elevó hasta el 2,66%, un dato peor que el registrado el año pasado (2,33%) y que es muy superior al objetivo pactado con Bruselas del 1,8%. Un desfase que, unido a las tradicionales dificultades de las comunidades autónomas para cumplir su límite y a los problemas de la Seguridad Social, cada vez hace más plausible que se produzca el peor escenario previsto por la Comisión Europea y que supondría cerrar este año el déficit en el 4,6%. Un dato que obligaría a un recorte de 15.000 millones en el 2017 para cumplir la nueva senda que implica rebajar al 3,1% el objetivo el año que viene.

El Ministerio de Hacienda justificó este empeoramiento del déficit del Estado por la mayor liquidación del sistema de financiación del 2014 efectuado en julio y que favorece a las comunidades autónomas. De hecho, la liquidación (la diferencia entre las transferencias adelantadas por el Gobierno a las comunidades y las que realmente les correspondía por los ingresos tributarios) asciende a 7.891 millones, lo que supone 6.913 millones más que la liquidación efectuada el año pasado. Unos nuevos recursos que el departamento que dirige Cristóbal Montoro espera que los gobiernos regionales destinen en gran parte a compensar el desvío del déficit del pasado ejercicio.

En cualquier caso, la principal razón que explica el mal comportamiento del déficit del Estado se encuentra en la evolución negativa de los ingresos con una caída de 6,9% hasta los 94.194 millones, en términos de contabilidad nacional. De hecho, en los siete primeros meses del año la recaudación impositiva retrocedió un 6,7%. La mayor caída se produjo, una vez más, en el Impuesto de Sociedades con un desplome del 38,2% al pasar de los 10.577 millones en el 2015 a los 6.540 millones en el 2016. Este descenso se debe a la supresión de medidas adicionales sobre esta figura, entre otras, la eliminación del tipo mínimo en el pago fraccionado y también a la primera fase de la reforma fiscal que implica una reducción del gravamen.

El desplome en los ingresos de este impuesto, el único que todavía se encuentra lejos de alcanzar los niveles previos a la crisis, ya obligó al Gobierno a rectificar. En concreto, tuvo que comprometerse con la Comisión Europea para evitar la multa por incumplir el déficit del 2015 a adelantar el cobro de este tributo y recuperar un tipo mínimo del pago fraccionado que oscilará entre el 20% y el 25% -hasta el 2015 era el 12%- para las compañías con una facturación superior a 20 millones. El objetivo es lograr 6.000 millones este mismo año que ayuden a cuadrar las cuentas, aunque la medida -que tendría carácter permanente hasta mejorar la recaudación- está supeditada a que se forme un nuevo Ejecutivo.

Retroceso del IRPF

Sin embargo, los ingresos por el IRPF también se han resentido con una caída del 13,5% hasta alcanzar los 18.505 millones. Un descenso que Hacienda achacó de nuevo al «efecto de la liquidación definitiva de 2014 de las comunidades autónomas, que ha supuesto una mayor devolución de 2.133 millones respecto a la del 2013». Sin embargo, también influye el impacto de la reforma fiscal que supuso una bajada de tipos. Una vez más las buenas noticias a escala impositiva se encontraron en el IVA, que logró una recaudación de 39.202 millones, un 2,5% más que en los siete primeros meses del año pasado.

Por otra parte, la reducción de los gastos no financieros del Estado en julio se redujo un 1,6% hasta los 124.036 millones, con una especial disminución del 5,1% de los intereses de la deuda gracias a la mejora de la financiación en los mercado hasta el punto de que los ahorros estimados por este motivo serán 1.500 millones mayores a los previstos, según adelantó el Gobierno.

Ayer también se conocieron las cuentas de la Seguridad Social hasta julio que reflejaron un déficit de 5.721,48 millones, lo que supone un incremento del 29,3% respecto al año anterior. Ese desequilibrio, equivale al 0,51% del PIB frente a un objetivo del 1,1%. Un cumplimiento que organismos como la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) consideran «muy difícil» de lograr.

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