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El desbocado déficit lastra la imagen de España pese a crecer más que nadie

La Comisión, que guarda silencio sobre la multa, enmienda a Rajoy y cree que el país no cuadrará sus cuentas en el 2017 sin aprobar más ajustes

ADOLFO LORENTE

Miércoles, 4 de mayo 2016, 00:10

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Que hay preocupación sobre la situación que atraviesa España lo evidencia, por ejemplo, el hecho de que en una comparecencia en la que sólo se deja preguntar a un corresponsal de cada país para hablar precisamente del suyo, un periodista británico especializado en mercados decida preguntar por España. No obtuvo respuesta. «Obviamente hay decisiones que tomar, pero abordaremos el asunto a su debido tiempo», zanjó el comisario de Economía, Pierre Moscovici. Porque ayer, mientras el Rey decretaba en Madrid la disolución de las Cortes, en Bruselas el país comenzaba su particular viacrucis fiscal que puede convertirle en el primer Estado multado por incumplir el déficit. Todos los argumentos técnicos llevan a la sanción (de hasta 2.000 millones o, por el contrario, solo cero euros), pero la decisión final será política y la tomará el Colegio de Comisarios el día 18. Y si algo no quiere el presidente Juncker son más problemas, así que todo cabe aún.

Las sensaciones son contradictorias, como demuestran las previsiones macroeconómicas de primavera publicadas por la Comisión. España sigue siendo la potencia que más crece y con gran diferencia respecto a Alemania, Francia, Italia y la media comunitaria. Lo hará el 2,6% este año y el 2,5% el que viene, en contraste con la revisión a la baja para el resto de grandes países. Entonces, ¿multará Bruselas a quien crece casi al doble que la media?

Viendo el «robusto crecimiento» del Producto Interior Bruto (PIB), quizá no. Pero cuando uno pasa al cuadro del déficit la respuesta es sí, y con mayúsculas. La Comisión ha empeorado ligeramente el último cuadro macro aprobado por Madrid y cree que no se bajará del 3% respecto al PIB hasta 2018. Para este año estima un desfase del 3,9% y del 3,1% para 2017 (frente al 3,6% y el 2,9% que sostiene el Gobierno).

En teoría había que haberlo conseguido ya este año, pero el fortísimo desvío de 2015 ha abocado al país a tener que pedir otra prórroga (la cuarta desde 2009). Si hay multa, será por esto, por dejarse llevar para evitar el enorme desgaste que las reformas han provocado en el PP. El problema es que el 3,9% previsto convertirá este año a España en el peor país de la UE, incluso por delante de la devastada Grecia.

¿La nueva prórroga será entonces de uno o dos años? Moscovici eludió pronunciarse, aunque el ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, cree que bastará un año. Fuentes de la Comisión corroboraron este argumento, pues la bajada estimada del 3,9% al 3,1% se ha realizado vía estabilizadores automáticos sin computar nuevas medidas con un Gobierno provisional.

La clave no será esa. Lo importante es qué peaje se tendrá que pagar por no cumplir. Qué subidas de impuestos y recortes de gastos habrá que aprobar y, lo más importante, qué predisposición tendrá el nuevo Ejecutivo que salga de las urnas para hacerlo. Porque España gastará este año unos 40.000 millones más de lo que será capaz de ingresar.

La inestabilidad, un riesgo

El informe conocido ayer advierte del «riesgo» por la «inestabilidad política». Desde la Comisión, no obstante, lo ven todavía algo potencial porque por ahora «no se ha notado absolutamente en nada», como evidencia el fuerte crecimiento del 0,8% registrado en el primer trimestre.

El escrito también desliza su creciente preocupación por el descontrol de las autonomías. Tras destacar el ahorro de gasto del 0,3% del Producto Interior Bruto aprobado por el Consejo de Ministros, recuerda que para que realmente sea efectivo se «requiere la participación activa de varios niveles de Gobierno y un estricto cumplimiento». Un claro aviso a las comunidades.

La tasa de desempleo seguirá siendo del 20% en 2016 y del 18,1 en 2017. De nuevo, el peor país de la UE sólo por detrás de Grecia. Una dramática realidad que hace que España, paradójicamente, sea el líder comunitario en creación de empleo. Crecerá el 2,5% este año y un 2% el que viene, el doble que el conjunto de la UE. Algo lógico. Cuando uno toca suelo, sólo se puede ir a mejor.

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