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España es 29.200 millones más pobre que antes de la crisis

Eurostat confirma que el país cumplió el déficit en 2014, pero se sitúa como el segundo país de la UE con el desfase más alto entre ingresos y gastos

A. LORENTE

Miércoles, 22 de abril 2015, 00:37

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bruselas. La radiografía macroeconómica publicada ayer por Eurostat da lugar a varias lecturas y todas, las positivas y las negativas (las más), ya conocidas. Se confirma que el nuevo «alumno ejemplar» de la Europa posrescates, España, vuelve a ganar músculo y que, ya inmersos en el octavo año de la crisis, la luz al final de túnel brilla con una fuerza inusitada. Lo dice Bruselas, el BCE, el FMI y lo aseguran los datos, los macro, porque la economía real aún espera la buena nueva. Pero hay luz, ya no hay duda. Sin embargo, el peaje pagado ha sido enorme, como evidencia que, pese a la recuperación, la cuarta potencia del euro sigue siendo 29.280 millones de euros más pobre que en 2008, cuando se batieron todos los récords macroeconómicos de la España del milagro, la del ladrillo, la del exceso.

Durante el pasado año, la riqueza nacional nominal cerró en 1,058 billones, 7.300 millones más que el año anterior pero muy lejos de los 1,87 billones de 2008. Lo positivo es que España supera en 5.000 millones los guarismos de 2007, cuando la 'fiesta' ya tocaba a su fin. Un mal menor que, sin embargo, no oculta que el país ha sido la única gran potencia que ha sufrido un empobrecimiento en términos de PIB. Ni Alemania, ni Francia, ni Italia, ni Reino Unido, ni Holanda. Ningún gran país es más pobre ahora que antes de la crisis.

Cuando se está en el fondo y el 'enfermo' tiene potencial, la única opción es recuperar parte del terreno perdido a tal velocidad que todos te señalan como el «ejemplo a seguir». Y en Bruselas, matices al margen, España lo es. Su vaso sólo se ve medio lleno. Por ejemplo, Eurostat confirmó que Hacienda cumplió con el objetivo de déficit del 5,8% establecido por la Comisión Europea. Sin embargo, este porcentaje revela que el país gastó 61.391 millones más de lo que fue capaz de ingresar. Un desfase que en términos de PIB es el peor tanto de la Eurozona como de la UE, sólo superado por Malta.

Toque del Eurogrupo

Y hablando de gastos de 2014, España siguió siendo la gran potencia del bloque comunitario que menos dinero público gastó. Un 43,6% del PIB, frente al 47,3% registrado por ejemplo en 2012. Sin embargo, la media de la Eurozona es del 49% y en países como Francia se llega a disparar hasta el 57,2%. Alemania, sin embargo, sí presenta un registro casi calcado al del Gobierno de Rajoy.

Otro de los grandes problemas endémicos del modelo tributario español es que, pese a tener uno de los impuestos más altos de toda la UE (en lo referido a tipos nominales), es uno de los socios que menos recauda por el sistema de desgravaciones. El volumen de ingresos se sitúa en el 37,8% del PIB por el 46,6% de la Eurozona o el 53,2% de Francia. Incluso Italia se aproxima al 50%. España, por contra, sigue estancada en el 37% registrado desde 2012 a pesar de la subida de impuestos aprobada por el Gobierno del PP al arrancar la legislatura.

La radiografía realizada por la agencia estadística comunitaria también habla de la deuda pública y de cómo España debe ya 1,03 billones de euros, el 97,7% del PIB. Adeuda 68.000 millones más que en 2013 y 654.000 más que en 2007, cuando sólo se debía el 36,2% del PIB (el límite impuesto en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento es del 60%). En esta ocasión España no sale mucho peor parada que sus socios comunitarios, ya que la inmensa mayoría peca de los mismos 'vicios'. En apenas unos años Europa sólo hablará de deuda y no de déficit; y antes de lo pensado.

Pero esto es futuro y el presente, de momento, es un Eurogrupo que se celebrará este próximo viernes en Riga (Letonia) y en el, que al margen de Grecia, también se hablará de España, de la tercera revisión que los hombres de negro realizaron dentro del programa de seguimiento del rescate financiero ya expirado. Se echarán muchas flores, pero se volverán a pedir más reformas; sobre todo, laborales.

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