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M.G.
Viernes, 28 de agosto 2015, 00:55
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Día de transición en Bilbao después de una feria que camina a trompicones y con dos semifinales que han defraudado al respetable por el juego visto en una de ellas y el que no apareció en la segunda, pues se suspendió con 0-2 en el marcador. Hoy llega al frontón Bizkaia el clásico Desafío del Vino que precede a la final del torneo, que se jugará mañana.
La dos empresas han previsto un enfrentamiento dentro del Cuatro y Medio. En el partido que abre el frontón (18.00) se miden Ezkurdia y Artola, dos pelotaris que pelearán por los títulos oficiales en esta distancia; cerrará otro mano a mano que protagonizan Olaetxea e Irribaria. La nota destacada la pone el partido de parejas. Cuatro pelotaris en pocos metros. Bengoetxea jugará con Beroiz y Altuna III lo hará con Rezusta. Desde luego, los dos delanteros pueden disfrutar y mucho de la distancia porque ambos son rematadores y les gusta enredarse.
La cátedra confía en que así sea después de unos días de pelota alterados por el fútbol (ayer jueves no hubo festival porque jugaba el Athetic) y de dos jornadas en la que se ha visto poco juego sobre la cancha. En la primera semifinal, Irujo y Merino acabaron por la vía rápida con la escasa oposición de sus adversarios, Urrutikoetxa y Albisu. 22-6 reflejó el electrónico. Un día después la segunda semifinal no existió al lesionarse Pablo Berasaluze en el segundo tanto.
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