La pelota riojana, entre el presente y el futuro

Titín tiene claro que no hay tensión añadida por ser ésta su última comparecencia. «Para mí, todos los partidos tiene la presión de ganarlos», resume el caracolero. Se declara «animado y con ganas de empezar». «Además, es una ilusión extra jugar junto a David y contra Víctor. Se prevé una feria muy competida», resume el caracolero, que prefiere no mojarse en pronósticos. «Cualquiera de las seis parejas puede ser favorita porque estamos todos a un nivel muy igualado», incide.

Su compañero, Merino II, sí nota estos sanmateos como especiales. «Va a ser mi última feria con Titín y eso la hace diferente», explica. La felicidad de llevarse su tercer trofeo consecutivo sería doble por «ayudar a Titín a que se despida con una victoria». Su verano ha sido estupendo y en el Adarraga podría poner un broche de oro aunque el campeonato lo vea «muy complicado». «Parece que hay un grupo más fuerte que otro, pero no es así. El nivel es parejo», añade.

Para el de Villar de Torre, encarar estos últimos encuentros supone «un poco de pena». «Para mí va a ser triste, pero también para todos los demás pelotaris y los aficionados, porque Titín es un compañero que va a dejar un vacío muy grande en este mundo de la pelota», resume.

Mientras, el tercer riojano en liza, Víctor Esteban, supone el golpe de aire fresco en la cita festiva. Se ha ganado su sitio a golpe de triunfos y se ha preparado a conciencia para darlo todo en la cancha junto a Albisu. El de Ezcaray podría ser el 'malo' de la película si deja fuera a Titín, aunque no piensa en eso. «Al frontón hay que saltar con egoísmo, a ganar el partido. Pero no hay que pensar más que en disfrutar y dejar la presión en casa», resume.

Albisu le va a aportar tranquilidad y él no va a rehusar hacer su juego: «Intentaré dar lo mejor y no me voy a achicar, pero todo depende del día que te salga». Eso sí, que nadie se haga ilusiones: «Mi objetivo no es ocupar el lugar de Titín, sino mejorar y seguir creciendo como pelotari».