Borrar
Marc Márquez lidera la carrera de MotoGP, ayer, en el circuito de Phillip Island. :: G. N. / AFP
Márquez da el golpe en Australia

Márquez da el golpe en Australia

Su victoria y la debacle de Dovizioso le sitúan con 33 puntos de ventaja en el Mundial

BORJA GONZÁLEZ

PHILLIP ISLAND.

Lunes, 23 de octubre 2017, 00:16

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Andrea Dovizioso creía el sábado que lo que le había pasado al resto de Ducati, que no habían logrado meterse entre los doce primeros de la parrilla, no iba con él. Su nivel de confianza le llevó a pensar que estaba listo para la pelea de Phillip Island, pese a salir undécimo, y que iba a seguir manteniendo sus opciones en carrera. Pero no fue así. El italiano y su moto vivieron una debacle inesperada, con Scott Redding, undécimo, como el mejor en carrera y con su mejor hombre en la general, ese que aspira -o aspiraba- a lograr el título en el puesto trece, a más de 21 segundos del ganador, para más señas, el líder, Marc Márquez.

«Quiero pensar que tengo opciones», explicó Dovizioso tras la prueba. Una esperanza a la que parece que tenga poco agarre viendo el recorrido de Márquez en la segunda mitad de la temporada: primero en Alemania, primero en la República Checa, segundo en Austria, un cero en Silverstone por una rotura de motor, primero en Misano y en Aragón, segundo en Japón y primero en Australia.

«Hay un cachito, un cachito grande del Mundial aquí, sobre todo porque han sido 25 puntos contra tres de Dovizioso, y de una ventaja de once puntos pasar a 33 es importante», analizó satisfecho de Repsol Honda. «Pero también psicológicamente, ya que si aquí volvía a recuperar puntos a él le habrían salido alas y a mí me habrían empezado a entrar dudas y por eso era importante. Por eso lo dije y me puse la presión de que era importante quedar delante de él, no me esperaba tanto, pero bienvenido sea».

Márquez gestionó una fantástica carrera de manera magistral. Supo no perder los nervios en una batalla eléctrica contra pilotos como Valentino Rossi o Maverick Viñales, acostumbrados a estar delante, con otros como el sobreexcitado Johann Zarco, y más, como Aleix Espargaró -que terminó por los suelos y con una fractura en un dedo de la mano izquierda que le va a obligar a pasar por el quirófano-, Cal Crutchlow o los más novatos en estas lides Jack Miller y Alex Rins. Un grupo de Moto3 en una carrera de MotoGP.

En esas, Márquez no perdió el pulso, aguantó el desgaste de sus neumáticos y atacó cuando vio que era el momento adecuado. Y nadie le pudo aguantar. «Creo que hubiera estado difícil batallar la carrera con Marc, pero llegar creo que hubiera llegado, porque la Yamaha estaba funcionando muy bien, sobre todo porque hemos mejorado mucho la tracción y por eso estoy muy contento», explicó el tercero del podio, Viñales, que pese a perder sus pocas opciones matemáticas al título salió satisfecho con su mejoría.

Rossi, desaparecido

El buen hacer de Yamaha se vio, además de en Zarco, en el segundo puesto de Rossi, desaparecido a lo largo del fin de semana y que, como es marca de la casa, apareció cuando más importante es hacerlo, en carrera.

Rossi fue uno de los muchos que terminó con marcas de neumático en el mono, secuelas de la intensa refriega. «Lo de hoy es como un 25 y un cero. La realidad es ésta, no podemos cambiarla», se conformó Dovizioso acerca de su posibilidad de haber sido campeón del mundo este año. «Hemos estado muy fuertes en casi todas las condiciones, pero esta vez nos hemos encontrado con una situación que tenía un límite y no lo pudimos superar. La realidad dice que, en Malasia, Márquez afrontará su primera bola de campeonato. El que podría ser su cuarto en la clase reina.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios