Secciones
Servicios
Destacamos
COLPISA
Sábado, 1 de agosto 2015, 23:30
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
La catalana Ona Carbonell (93,1284 puntos) consiguió la medalla de plata en la prueba de solo técnico de natación sincronizada, ayer en el Mundial de Kazán, donde se impuso la local Svetlana Romashina (95,2680), que conservó así su título logrado en Barcelona 2013. La medalla de bronce fue para la china Sun Wenyan (91,5479).
Carbonell suma esta plata a su importante colección de metales preciosos. Es la decimoséptima medalla que la nadadora barcelonesa consigue en un Mundial, desde que empezara a sumar en Melbourne 2007. De todos ellos, sólo uno es de oro, en la combinada libre de Roma 2009.
La interpretación de 'Réquiem por un sueño' entregó a la solista española la segunda mejor nota de entre las 12 finalistas. Y mantuvo ese excelente puesto en la fase decisiva para proclamarse subcampeona del mundo.
Cabe recordar que Carbonell renunció en Kazán a las pruebas por equipos para centrarse exclusivamente en las rutinas en solitario y dúo. En la final obtuvo 28,1000 puntos en ejecución, 28,3000 en artístico y 36,7284 en elementos. Únicamente Romashina, a quien su interpretación del papel de la actriz estadounidense Julia Roberts en 'Pretty Woman' impulsó sin discusión al primer puesto en podio, superó a la enorme competidora catalana.
Romashina es otra de las grandes estrellas de la natación sincronizada en los últimos años. Su plata de este sábado en Kazán es la decimonovena de su carrera en un Mundial, desde su estreno en Montreal 2005, y la decimoséptima de oro.En el anterior Mundial, celebrado hace dos años en casa, en la Ciudad Condal, Carbonell sumó siete medallas (tres platas, cuatro bronces). En la prueba de solo técnico había sido bronce en el Mundial de Barcelona.
Se puede mejorar
«Estoy muy contenta, emocionadísima, porque no me lo esperaba. El objetivo era ser capaz de llegar al máximo, pero estando en Rusia, el Mundial siempre se complica más», explicó la barcelonesa en Radio Marca.
«He hecho un buen trabajo, aunque se puede mejorar. Hay que tener en cuenta que ha sido un día muy duro. Me he levantado a las cuatro y media de la madrugada para prepararme y luego la fase preliminar y la final en la misma jornada. Además, siempre tienes más nervios al abrir la competición», añadió Carbonell.
La española, que vuelve a competir hoy, aspira a tres medallas más durante esta competición y no puede tomarse ni un respiro. «Esto es un Mundial y apenas he podido disfrutar una horita del éxito. Ahora me tengo que concentrar porque me quedan tres opciones más de podio y el domingo afronto el dúo técnico con Clara Camacho. Lo llevamos bien preparado pero hay grandes rivales como Ucrania, China o Japón», subrayó la nadadora. De todos modos, empezar como subcampeona supone «un plus de energía» para Ona.
El Mundial de Kazán comenzó el viernes. Las competiciones de saltos, aguas abiertas natación sincronizada y waterpolo son las primeras en arrancar, antes de dejar paso, durante la segunda semana, a las pruebas estelares de carreras en piscina y de saltos desde lo más alto.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.