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Maño se suma al ataque del Haro en una acción a balón parado, en la que no hubo incidencia.
Un partido para olvidar rápido

Un partido para olvidar rápido

El Haro cae goleado en su propio estadio ante el Osasuna B en la Copa

DIEGO MARÍN A.

Sábado, 20 de diciembre 2014, 12:41

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Si el Haro tenía alguna posibilidad de remontar la eliminatoria después de haber perdido en Tajonar por 1-0, esta se esfumó ayer en el minuto 11 de partido. Fue lo que tardó el filial de Osasuna en marcar el primer tanto del encuentro. El jugador de Logroño Pablo remató a puerta un balón tras una carambola en el área pequeña. Aún con todo el contra, el siguiente cuarto de hora fue el mejor de los blanquinegros. Un buen centro de Suárez desde la banda izquierda acabó con un remate en plancha de Collado que se marchó alto. Después, el propio Suárez robó algunos balones en el centro del campo que propició los contraataques del Haro, sin fruto.

Los jarreros se despidieron definitivamente de la Copa Federación en el minuto 27, cuando Satrústegui recibió un balón cerca del área, se introdujo en ella, regateó al portero juvenil Maicas y marcó el segundo gol. Después, algunos disparos lejanos de los riojanos Suárez y Hierro que se fueron muy desviados de la portería navarra. Iñaki Pacheco había apostado por las rotaciones, por un segundo equipo plagado de jugadores poco habituales y canteranos, en busca de reservar fuerzas y armas de cara al trascendental partido del próximo domingo, en liga, frente a la SDL. Esto se definió aún más cuando, en la segunda parte, hizo debutar a Ander e Iñigo. Entonces se produjo una lluvia de goles, hasta cinco solo en esa segunda parte del encuentro.

Nada más arrancar de nuevo, Satrústegui marcó. Su segundo gol fue un remate a placer tras un centro raso de Balsa. En el 64, un calco del gol anterior: Manjón sirvió desde la misma banda derecha para que Imanol empujara a puerta. Dos minutos después fue Manjón quien aprovechó un rechace en el área para marcar el quinto. Un contraataque en el minuto 75 provocó el sexto gol, de nuevo de Manjón. Y el último, marcado por Barja, fue una carrera en solitario hacia la portería de Maicas, sin defensores tras él, y un mano a mano sin aliciente. Siete goles en contra. En total, ocho en la eliminatoria. Para olvidar. Y rápido.

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