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R. ERRASTI
MADRID.
Miércoles, 28 de marzo 2018, 23:40
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Primero, sorpresa e incredulidad. Después, indignación. Finalmente, respuesta pública. Así fue el proceso de reacción en la sede de la Federación Española de Fútbol (FEF) al reportaje emitido el lunes por el programa 'Fiebre Maldini', en el que el seleccionador (Victor Scerri) y varios internacionales de Malta (como el goleador aquel día Silvio Demanuele, Bussutil o Fabri) acusaban a España de usar productos prohibidos en el histórico 12-1, tanto para mejorar su rendimiento (esteroides) como para perjudicar el de la selección mediterránea (con unos «limones cortados» impregnados en una sustancia con efectos narcóticos que les proporcionó «un hombre pequeño vestido de blanco» que llegó al vestuario).
La FEF lanzó ayer un comunicado para rechazar «tajantemente las acusaciones vertidas, recientemente, por alguno de los integrantes de Malta que participaron en el partido que se celebró el 21 de diciembre de 1983, en Sevilla».
La FEF calificó «dichas afirmaciones» como «rotundamente falsas». «Carecen del más mínimo fundamento y son totalmente extemporáneas. La Federación confirma la absoluta limpieza de sus jugadores, reitera que ha sido uno de los partidos más importantes de la historia de la selección absoluta, que concluyó con el resultado de 12 a 1 y que sirvió para que España se clasificara para la fase final de la Eurocopa'84, celebrada en Francia, en la que fue subcampeona», recordó.
Por último, en su nota, la Federación Española de Fútbol solicita «absoluto respeto para la selección nacional», al tiempo que anuncia que «se reserva la posibilidad de emprender acciones legales de toda índole contra quienes traten de ensuciar la buena imagen del fútbol español».
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