Otra final española es posible

El semifinalista deseado por todos, la Juventus, le correspondió al Real Madrid en su camino hacia la 'undécima', con el recuerdo de la 'séptima' conquistada por los blancos en 1998 ante el conjunto italiano, y también de la Champions ganada por el Milan de Carlo Ancelotti frente a su exequipo 'bianconero' un lustro después. El partido de ida se disputará el martes 5 de mayo en el Juventus Stadium, con la ventaja de la vuelta en el Santiago Bernabéu una semana después, el día 13. Sin embargo, el más temido, el mayor coco para cualquiera de los representantes españoles, el Bayern de Pep Guardiola, quedó emparejado con el Barça, que tendrá la oportunidad de vengarse de los alemanes de la humillante eliminación sufrida hace dos temporadas, por un global de 0-7.

El Barça se reencontrará por tanto el miércoles 6 de mayo (en el Camp Nou) con el mito azulgrana y creador de este equipo ganador, Pepe Guardiola, y también con Thiago Alcántara -a quien dejó escapar por error-, en una semifinal estelar que promete ser espectacular, protagonizada por dos equipos caracterizados por el fútbol ofensivo y el talento. Los más en forma de Europa en la actualidad. El morbo de esta eliminatoria que se resolverá el 12 de mayo en el Allianz Arena de Múnich y que se presenta con un ligero favoritismo para los catalanes estará en el duelo de banquillos. Entre el técnico venerado por los culés que llevó al Barça a adjudicarse dos Ligas de Campeones, y su amigo Luis Enrique, que entonces dirigía al filial y ahora a un equipo en crecimiento que, al igual que el Bayern, aspira este año al triplete.

«Será una eliminatoria bonita y muy especial para mí, pero no fácil. Creedme: ¡El Barcelona es el más fuerte!», subrayó Guardiola, mientras Luis Enrique, consciente de que está al frente de un grupo potentísimo que ha recuperado a Messi para aspira a la 'quinta', no se mostró temeroso ante los alemanes ni frente a quien considera «el mejor entrenador». «Cuando hay un sorteo de este tipo, sea la competición que sea, sólo pienso en la poca suerte que tiene el que le toca jugar contra el Barça», sentenció el asturiano.

El cruce del Real Madrid también tendrá un atractivo añadido, por el enfrentamiento de Morata contra los blancos y el deseo del ahora '9' de la Juventus de reivindicarse ante el club que le obligó a emigrar a Turín. Tampoco faltará su suplente, Fernando Llorente, Tévez ni el veterano Pirlo, aunque el conjunto italiano reza para que Pogba llegue a tiempo, mientras el Madrid, sin Luka Modric, espera disponer de Gareth Bale y de Karim Benzema. En cualquier caso, el defensor del título es claro favorito ante un conjunto turinés amante del 'catenaccio' que ha regresado a las semifinales, 12 años después, sólo con un gol a favor ante el Mónaco, y gracias a un penalti inexistente.

Víctimas camino del título

Aunque con un tanto de última hora de Chicharito, el Madrid fue sin embargo superior al Atlético en los dos encuentros de cuartos y los blancos que se agigantan en Europa han recuperado la autoestima. La incómoda 'Juve', pese a su oficio y su estilo ultradefensivo, ante el que los madridistas encuentran muchas dificultades y suelen sufrir -se volvió a comprobar ante el conservador equipo de Simeone-, no debería ser un obstáculo para que el campeón se cite con el Barça o el Bayern en el choque decisivo, aunque Ancelotti reconoce: «Para ganar necesitamos al mejor Real Madrid, al que ha jugado contra el Atlético, con las mismas ganas e ilusión».

En este duelo a priori desequilibrado el que impone miedo no es el rival del conjunto español, sino el Madrid, aunque el técnico de la Juventus, Massimiliano Allegri, no parezca asustarse. «Campeones vigentes, un estadio enorme y exigente, un técnico entre los más exitosos de Europa. Pero será once contra once, ¡eh!», escribió en su Twitter. «Los defensores del título son unos monstruos», apuntó el checo Pavel Nedved, ex de la 'Juve' y embajador de la 'cenicienta' en el sorteo. Madrid y Juventus ya se enfrentaron la pasada temporada en la fase de grupos, con un 2-1 en el Bernabéu y un 2-2 en Turín antes de ganar la 'décima'.

También el Barça despidió a su futuro rival, en cuartos de la temporada 2008-2009 (4-0 en el Camp Nou y 1-1 en Múnich), en la senda hacia su tercera Copa de Europa. Afectado este curso por una plaga de lesiones, el Bayern que vuelve a dirigir con brillantez Thiago -se encontrará con su hermano Rafinha- confía en recuperar para la ida a Robben y Ribéry, para intentar equilibrar la potentísima tripleta atacante azulgrana formada por Messi, Luis Suárez y Neymar. Para muchos aficionados esta semifinal tiene tintes de final anticipada pero, sobre todo, lo que destila es aires de revancha después de la paliza de los germanos al Barça en las semifinales de la campaña 2012-2013, con un 4-0 en Múnich y un 0-3 en el Camp Nou. Entonces, Tito Vilanova dirigiría a los azulgrana y Jupp Heynckes al Bayern. Ahora es Guardiola quien marca un cruce letal apasionante.